Las verduras al horno y sus beneficios para la salud

Si no te gustan mucho las verduras, este post te hará cambiar de opinión. Las verduras al horno, si están bien condimentadas, no sólo son extremadamente nutritivas, sino también deliciosas. Anímate, toma nota de estos consejos y disfruta!
Las ventajas de la cocción
Elegir el horno en lugar de freír, guisar, empanar o utilizar otras técnicas culinarias que impliquen un contacto directo entre las verduras y los aceites o las salsas será beneficioso para tu salud.
En primer lugar, porque prepararás platos más ligeros, con menos grasa y más fáciles de digerir, lo que es bueno para todos.
Además, se asegurará de que los nutrientes que contienen las verduras (vitaminas, minerales, fitoquímicos, etc.) no se pierdan, y sus platos serán aún más nutritivos como resultado.
La única precaución es tener mucho cuidado de no quemar las verduras: para evitarlo, basta con comprobar la temperatura del horno y el tamaño de las verduras.
Algunos trucos y para preparar unas verduras al horno perfectas
Se puede cocer prácticamente cualquier tipo de verdura en el horno. Es la mejor manera de asegurarse de no perder ningún nutriente y aprovechar al máximo.
La temperatura del horno debe ser de unos 200º.
Corta todas las verduras en trozos de igual tamaño para que se cocinen todas al mismo tiempo.
Pon las verduras en una bandeja de horno sin apilarlas unas encima de otras, ya que de lo contrario perderán su crujido. Recuerda estar al tanto del proceso y dar vueltas a los alimentos de vez en cuando para asegurar una cocción uniforme y completa.
Si cortas las verduras en trozos grandes, tendrás que cocinarlas por más tiempo. Si lo prefieres, una vez que hayan empezado a dorarse, baja la temperatura del horno a 175° y déjalas en el horno hasta que estén cocidos.
Esperamos que estos pequeños consejos estimulen tu creatividad culinaria y te den ganas de experimentar con tus combinaciones favoritas.