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Salud

La frecuencia con la que lavamos las sábanas nos indica nuestro estado de salud

Cambiar las sábanas de nuestra cama es un hábito que debemos hacer con más frecuencia, dado que esta práctica está muy enlazada con nuestro estado de salud.

Una de las cosas con las que más estamos en contacto son las sábanas. ¿Alguna vez te has preguntado si las cambias con la suficiente frecuencia? En efecto, la regularidad con la que cambiamos las sábanas está relacionada directamente con nuestra salud.

Usualmente, lavamos e higienizamos pisos, baños y cocinas, pero cuando procedemos a cambiar las sábanas no las reemplazamos regularmente porque creemos que aún están limpias y perfumadas. Sin embargo, las sábanas pueden ser responsables de algunas enfermedades.

Porque debemos cambiar con frecuencia las sábanas

Nuestras sábanas podrían contener microorganismos que deterioran nuestras vías respiratorias. Por ejemplo, ¿se han dado cuenta de que los niños se enferman con más frecuencia cuando se quedan demasiado tiempo en casa que cuando salen al aire libre? Esto ocurre porque el polvo que se encuentra en las sábanas esconde ácaros, grandes enemigos del asma y las alergias.

Según el patólogo y microbiólogo, Philip Tierno, cambiar y lavar las sábanas al menos una vez a la semana es primordial para nuestra salud.

No importa cuán limpias o fragantes se encuentren nuestras sábanas, básicamente el problema es que descuidar la higiene de la cama puede causar incómodos problemas de salud.

El profesor Tierno, afirma lo siguiente: “Cuando las sábanas no se cambian, se acumulan grandes cantidades de partículas, incluidas las células humanas. Estas células sirven de alimento a los ácaros del polvo, cuyas heces son muy alergénicas”.

Asimismo, el profesor sostiene que son precisamente las bacterias y los ácaros los que producen irritaciones cutáneas, asma, conjuntivitis y alergias de diversa índole.

La costumbre de abrir puertas y ventanas es excelente para intercambiar el aire y eliminar el polvo. Lastimosamente, no cambiar con regularidad las sábanas reduce estos beneficios, originando la aparición de moho, esporas de hongos y hasta pequeños insectos.

Cuando cambiamos las sábanas frecuentemente y las lavamos en la lavadora a una temperatura de al menos 60° C, contribuimos a mantener sana la salud de toda nuestra familia eliminando los ácaros y bacterias.

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