5 cosas que no debes hacer durante el verano si tienes el pelo decolorado

A pesar de que los tratamientos han mejorado con el pasar de los años, por lo que ahora son menos agresivos, no hay que negar que aclarar el color natural del pelo conduce a su debilitamiento, aunque sea mínimo.

Debido a que el sol, la sal y las altas temperaturas tienen el mismo efecto decolorante, trata de no realizar estas 4 acciones durante el verano, con el fin de evitar que tu cabello sea un completo desastre.

Dejar tu pelo expuesto al sol.

Dejar que los rayos del sol entren en contacto directo con el pelo decolorado, puede generar su oxidación antes de lo esperado, además de dañar sus fibras, las cuales se encuentran débiles por los tratamientos. Cuando te tiñes el pelo, las escamas de este se vuelven delicadas y vulnerables, por lo que si quieres ir a la playa, es mejor acudir al estilista, pero con unas semanas de anticipación al viaje, en vez de visitarlo a solo unos días de la salida.

Asegúrate de llevar una loción protectora cuando vayas a la playa para que puedas cuidar tu pelo decolorado del sol. Suelen venir en forma de aceite en spray pero hay diferentes tipos y para todos los bolsillos.

No lavarlo después de ir a la playa o a la piscina.

Otro de los grandes enemigos del pelo decolorado es la sal que se encuentra en el mar. Por lo que, si en tus vacaciones hay un constante sometimiento a las aguas del mar y una excesiva exposición al sol, no olvides darte un baño rápido después de haber estado en la playa. Solo hay que pasar un poco de agua fresca por encima para eliminar, al menos parcialmente, la sal, la arena o el cloro.

No hidratarlo correctamente.

En los meses más cálidos, la tentación de lavarse el pelo todos los días es fuerte, tanto cuando estás en la playa como cuando regresas a la ciudad. Las altas temperaturas nos llevan a querer buscar a menudo un refresco en la ducha y esta es sin duda una excelente estrategia para combatir el sudor y el calor, en cambio podría resultar excesiva para el cabello. Así que deja pasar al menos un día entre lavados y nutre tu pelo decolorado tanto como sea posible.

La decoloración deja el pelo bastante seco y en verano esta característica se acentúa, por lo que la consigna en la fase de lavado es hidratarlas lo máximo posible utilizando champús especialmente formulados para la necesidad concreta. Si el color que has elegido es bastante claro, también puedes utilizar un champú anti-amarillo para conservarlo . Reconocerlo es simple, ya que se presenta en un inconfundible tono púrpura. Después del champú, no olvide el acondicionador, que también debe ser elegido lo más nutritivo posible. Una vez a la semana, dale un extra de mimo a tu pelo decolorado aplicando una mascarilla curativa ultrahidratante .

Usar con mucha frecuencia el secador y la plancha para el cabello.

A pesar de que quieras probar un nuevo estilo en esta época, trata de usar (o no hacerlo) con poca frecuencia los elementos de peinados que implique el uso de altas temperaturas, por ejemplo: los secadores, la plancha para alisar o rizar el cabello.

El calor necesario para desempeñar su función correctamente, generan resequedad en el cabello decolorado, y tiende a dañarlo ligeramente en cualquier condición. Sin embargo, en verano, cuando el sol y el calor cumplen con su función, este efecto se multiplica.

Por ello, se recomienda probar con estilos naturales: dejar que el cabello se seque suelto al aire libre, y trata de no hacer uso de la plancha o cualquier elemento parecido. En caso de que lo hagas, recuerda aplicar un protector térmico.