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Cómo elegir el agua mineral que más te conviene: presta atención a estos valores

Beber al menos dos litros de agua mineral cada día es una importante medida de salud que nos permite estar bien a nivel general. Pero ¿Cómo podemos saber cuál es el mejor tipo de agua mineral? El truco está en los valores del producto.

El agua permite al cuerpo funcionar correctamente día a día, por eso en nuestro hogar y rutina nunca puede faltar una botella de agua mineral. El agua mineral es llamada así porque se origina en fuentes naturales y acuíferos subterráneos que no han sido expuestas al consumo humano directo. De hecho, el agua mineral se embotella directamente del manantial sin ningún tratamiento químico, pero si se somete a algunos análisis para definir su potabilidad y calidad para luego llegar a nuestras mesas.

Beber por lo menos dos litros de agua mineral todos los días preferiblemente a temperatura ambiente es muy importante para mantener la buena salud del cuerpo. Entre sus muchas propiedades, es altamente reconocida por hidratar rápidamente, regular la temperatura corporal, mejorar la digestión y la función renal, también promueve la diuresis y la eliminación de toxinas, ayuda a mantener la figura y a quemar la grasa abdominal.

Entonces ¿Cómo podemos elegir el agua mineral correcta? Veamos algunos valores importantes.

Para elegir el tipo de agua mineral correcta, debemos conocer y comprender los valores presentes en la etiqueta de la botella. Aunque no lo parezca, cada marca de agua tiene una composición diferente basada en su contenido y la cantidad de sales minerales. Teniendo en cuenta esto, debemos prestar mucha atención al valor del residuo fijo, el cual hace alusión a una indicación de la cantidad de minerales depositados en el producto. Ten en cuenta que un residuo fijo por debajo de 50 miligramos por litro significa que se trata de un tipo de agua ligera con un bajo contenido de minerales que son útiles para estimular la diuresis sin forzar el trabajo de los riñones.

Un residuo fijo de menos de 500 mg/l nos permite comprender que se trata de aguas poco mineralizadas con un alto efecto diurético, ideal para beber a lo largo del día y tratar la hipertensión. Un residuo fijo entre 500 y 1500 mg/l se refiere a aguas minerales ideales para reponer las sales que se han perdido después de haber pasado por un gran periodo de sudoración. Un residuo fijo de más de 1500 mg/l se refiere a un tipo de agua rica en minerales, pero que debe beberse especialmente con fines terapéuticos y bajo supervisión médica.

Otro valor útil que merece la pena ser mencionado es que al elegir el agua mineral es importante tener en cuenta el valor del pH del grado de alcalinidad. El número ideal para este indicador es el 7: un pH inferior a 7 indica un líquido ácido, 7 indica agua neutra y superior a 7 se refiere a agua alcalina. Dicho de otra forma, Un pH por debajo de 7 ayuda a regular la digestión y uno por encima de 7 ayuda a regular la acidez.

Luego están aquellos casos particulares de aguas cálcicas, sódicas y sulfatadas. Las aguas cálcicas son ricas por su característico contenido de calcio y son muy útiles para aquellas personas que sufren de osteoporosis, las aguas sódicas tienen un alto contenido de sodio, lo que las hace ideales para los deportistas de alto rendimiento, pero deben ser evitadas por los que se encuentran pasando por alguna dieta o personas que sufren de hipertensión, por otro lado, las aguas sulfatadas son ideales para aquellas personas que sufren de estreñimiento ya que ayudan a la evacuación de residuos.

Por último, encontramos las aguas magnetizadas y ferruginosas. Las primeras hacen referencia a un líquido rico en magnesio y útiles para aquellas personas que sufren de calambres constantes y problemas de concentración, mientras que las segundas son ricas en hierro y muy útiles para contrarrestar los síntomas de la anemia.

Teniendo en cuenta toda esta información, te invitamos a revisar detalladamente las etiquetas de tu agua mineral favorita para poder identificar si es la que más se acomoda a tus necesidades. Por suerte, existe una gran variedad de aguas minerales que pueden ajustarse a tu día a día y al rendimiento de actividades que hagas regularmente

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Veronica Pereira