Cepillarse los dientes regularmente reduce el riesgo de cáncer de garganta en un 50%. El estudio
Cepillarse los dientes regularmente podría ayudar a prevenir el cáncer. Según un estudio americano, las enfermedades de las encías resultantes de una mala higiene pueden aumentar el riesgo de cáncer de garganta y estómago en más de un 50%.
Y el riesgo es aún mayor para aquellos que han perdido los dientes anteriormente. Esto lo dicen los investigadores de la Escuela de Salud Pública T.H. de Harvard en Boston, que examinaron las tasas de cáncer de esófago (garganta) y gástrico (estómago) en 98.459 mujeres y 49.685 hombres durante un período de más de 20 años.
Anteriormente se descubrió que la enfermedad de las encías lleva a problemas cardíacos cuando las bacterias se propagan por el torrente sanguíneo. La acumulación de bacterias en las encías, los dientes y la boca, es decir, también puede causar una inflamación que afecta principalmente al flujo sanguíneo y a las arterias.
Ahora, los científicos han encontrado que las personas con un historial de enfermedad de las encías son hasta un 52% más propensas a desarrollar cáncer de esófago o gástrico.
El estudio
Publicado en BMJ, el estudio analizó la salud dental, la demografía, el estilo de vida y la dieta utilizando cuestionarios de seguimiento, así como un posible diagnóstico de cáncer autoinformado y confirmado tras revisar los registros médicos.
Los resultados mostraron que durante los 22-28 años de seguimiento, hubo 199 casos de cáncer de esófago y 238 casos de cáncer gástrico.
Las enfermedades de las encías se asociaron con un aumento del 43% y 52% del riesgo de cáncer de esófago y cáncer gástrico respectivamente, mientras que los riesgos de cáncer de esófago y gástrico para los que habían perdido dos o más dientes eran también ligeramente más altos, 42% y 33% respectivamente.
¿Por qué está sucediendo esto?
Una posible razón es que la mala higiene bucal y las enfermedades de las encías podrían fomentar la formación de bacterias que se sabe causan el cáncer de estómago, dijeron los científicos. ¿Remedios? ¡Sólo una buena higiene oral! Cepíllese los dientes y use el hilo dental.
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