Las plantas que puedes “revivir” si vuelves de vacaciones y están secas
Hoy descubrirás cómo puedes saber si tu planta tiene remedio, qué hacer para ayudarla y qué tipos de plantas suelen recuperarse mejor. Antes de decidir que todo está perdido, dale una segunda oportunidad.

Llegas de unas vacaciones increíbles y lo primero que ves en casa son tus plantas tristes, hojas caídas y tierra totalmente seca. Ese panorama puede parecer un fracaso, pero la buena noticia es que muchas veces no todo está perdido. Aunque una planta luzca completamente seca, no significa que esté muerta. Si el tallo o las raíces siguen con algo de vida, todavía tienes la oportunidad de sacarlas adelante con unos sencillos pasos.
Para muchos, ver una planta totalmente seca puede parecer el fin, pero la clave está en mirar más allá de las hojas crujientes o el sustrato duro. El truco más sencillo es raspar con la uña un poco el tallo verde (o lo que parece que era verde). Si debajo de la capa superficial aparece una línea de color verde claro, esa planta sigue viva, y solo necesita un poco de ayuda.
Otra señal importante son las raíces firmes. Saca la planta de la maceta y observa las raíces: si todavía están blancas, gruesas y se sienten duras, no están muertas. Además, las hojas secas o caídas no indican que toda la planta se perdió. Incluso las plantas que solo parecen un manojo de palos secos a veces se “reconectan” si el interior sigue fresco. Por eso, antes de tomar decisiones drásticas, revisa con calma: una planta puede estar “dormida”, esperando tu atención para despertar.
Señales de que la sequía es reversible
La esperanza está en esos detalles que pasan desapercibidos. Si el tallo tiene secciones verdes o las raíces sanas no están podridas ni blandas, vale la pena intentar. Las pothos, por ejemplo, suelen recuperarse incluso si sus hojas se secan casi al completo, siempre que la base y las raíces sigan firmes. Lo contrario, tallos negros o raíces blandas y marrones, suele indicar que no se puede hacer mucho. Confía en las partes vivas: allí está la verdadera señal de recuperación.
Pasos esenciales para revivir plantas secas
El primer paso es retirar con cuidado las hojas, ramas o flores secas, permitiendo que la planta guarde su energía para lo que aún tiene vida. Usa tijeras esterilizadas para no contagiar plagas ni hongos. Después, mira la tierra seca. Si al tocar el sustrato parece seco como el polvo, no lo riegues directamente con mucha agua. Sumerge la maceta en un recipiente con agua tibia unos diez minutos; así las raíces absorben justo lo necesario sin asfixiarse.
Cuidado si la tierra está húmeda y las raíces huelen mal, puede que se haya podrido. Entonces conviene cambiar a un sustrato seco, airear bien y cortar todas las partes blandas o negras. Coloca la planta en un sitio de luz indirecta suave donde pueda recuperarse sin recibir calor directo. No fertilices aún; la prioridad es la hidratación y la recuperación, no el crecimiento.
Si ves que el tallo se mantiene firme o aparecen pequeños brotes, vas por el buen camino. Recuerda mantener la humedad relativamente alta si la planta así lo necesita, pero nunca ahogues las raíces. Si la planta responde, puedes ir volviendo poco a poco a su rutina habitual. La paciencia y la observación diaria hacen toda la diferencia.

Limpieza de partes marchitas
Para que la planta recupere fuerzas, corta todos los tallos y hojas secas cuidadosamente usando tijeras esterilizadas. Así, la planta no malgasta recursos en lo que ya no puede salvar. Aprovecha para revisar debajo de las hojas que quedan por si hay bichos escondidos o algún signo de plaga. Mejor prevenir que lamentar.
Hidratación y cuidado inicial
Usa agua tibia para sumergir bien la maceta, pero evita los encharcamientos. Luego, observa la planta durante los siguientes días. Si el tallo o las raíces responden, mantenla en un lugar protegido del sol directo. No riegues de más hasta que veas señales claras de recuperación.
Plantas comunes que se recuperan fácilmente
Algunas plantas de interior dan más margen de error ante el olvido. La sansevieria (lengua de suegra), por ejemplo, aguanta la sequía gracias a sus hojas gruesas y raíces profundas. La pothos es famosa por su capacidad de rebrotar incluso con una sola raíz viva y puede volver a sacar hojas en unas semanas si el tallo principal sigue verde.
El espatifilo (paz lily) responde muy bien a la inmersión en agua tibia cuando está seco. Sus raíces son fuertes y a menudo basta con cortar lo seco para que rehaga hojas nuevas. El ficus es otra planta agradecida: aunque pierda todas sus hojas, suele brotar otra vez desde las ramas si no se ha podrido el tronco. Un truco especial para ficus es hacer una poda ligera y dejarlo descansar en sombra clara para disminuir el estrés.
Apostar por plantas más resistentes como sansevieria o pothos te dará tranquilidad, ya que soportan mejor la sequía. No te quedes solo con el primer vistazo: muchas veces, tras unos días de paciencia y mimos, esas plantas que parecían perdidas vuelven a llenarse de hojas y color.