
Le ocurrió a una mujer de 86 años, contagiada por el Covid-19 en Italia en abril de 2020
El contagio por Coronavirus, la lenta aparición de algunos coágulos de sangre en tres dedos de las manos, la hinchazón, la progresiva coloración negra, la gangrena… hasta la amputación, único remedio identificado por los médicos: esta es la increíble odisea vivida por una mujer de 86 años y publicada en la revista científica European Journal of Vascular and Endovascular Surgery, que la presentó como uno de los casos más graves jamás documentados desde el inicio de la pandemia.
Coronavirus y trombosis
Los Hospitales Universitarios de Barcelona Vall d’Hebron y Germans Trias i Pujol han realizado pruebas e investigaciones sobre la correlación entre el Coronavirus y la trombosis analizando una muestra de 230 pacientes en cuidados intensivos en el año 2020: el resultado del estudio mostró que el 26,5% de los pacientes ingresados estaban afectados por trombosis venosa y/o pulmonar, siendo el 62% asintomáticos.
Elderly Italian woman gets gangrene, black fingers from COVID-19 https://t.co/ItUFUkHjh8
— Canoe (@Canoe) February 13, 2021
También se supo -y el descubrimiento se referiría al caso clínico de la mujer- que el Coronavirus desencadenaría la llamada tormenta de citoquinas, a través de la cual atacaría tanto a los tejidos enfermos como a los sanos. Una de las evidencias más frecuentes es la presencia de edema en las piernas, mientras que, sobre todo cuando se está acostado, sería más complicado detectar la trombosis venosa.