¿Cuáles son las secuelas de la bulimia y la anorexia?

Vivimos en una sociedad que es muy dura con las personas que no siguen los estereotipos o estándares de belleza establecidos. Parece que si no te «pareces» al resto y eres diferente, entonces no encajas. Pero la realidad es que la diversidad de personas es lo que nos hace únicos y especiales.
Lastimosamente, en los medios de comunicación actuales es común ver modelos con figuras y curvas poco convencionales, por lo que no es muy difícil imaginar cómo esto afecta a un adolescente o a un chico que apenas se encuentra construyendo su propia identidad y que quiere encajar en este mundo.
La anorexia y sus efectos los jóvenes
La lista de factores que pueden influir en los trastornos alimentarios pueden ser muchos y variados, claro, la televisión o las redes sociales no lo son todo, ya que son los factores socio ambientales ampliamente percibidos los que crean un trastorno dentro de la mente de los hombres y mujeres jóvenes.
Una persona que pasa por un trastorno alimentario negará tenerlo, pero será fácilmente detectable por su comportamiento, por lo que es muy importante que su entorno se mantenga alerta a las señales para poder intervenir lo antes posible.
Las consecuencias de los trastornos alimentarios
Cuanto más lejos llegue el trastorno, más difícil será tratar las secuelas. De hecho, se ha demostrado que la vida de una persona afectada por un trastorno alimentario se mantiene en alto riesgo hasta 5 años después de haber comenzado a tratar la enfermedad, motivo por el que estos pacientes deben pasar por un largo seguimiento médico y psicológico para evitar el riesgo de recaída o la aparición de nuevos trastornos.
Consecuencias físicas de la anorexia o la bulimia
Veamos algunas de las consecuencias físicas que pueden experimentar los pacientes diagnosticados con anorexia o bulimia nerviosa:
Secuelas endocrinas.
- Ovarios poliquísticos.
- Problemas en las hormonas tiroideas.
- Osteoporosis.
- Problemas con la producción de insulina.
Secuelas cardíacas.
- Disminución del tamaño del corazón.
- Arritmias.
- Prolapso de la válvula mitral (la causa más común de muerte en personas con anorexia).
- Extremidades frías.
- Presión arterial y cardíaca baja.
Secuelas hematológicas.
- Anemia.
- Problemas de coagulación de la sangre y falta de plaquetas.
- Deficiencia de glóbulos blancos.
- Trastornos inmunológicos graves.
Secuelas digestivas.
- Gastroenteritis.
- Reflujo ácido.
- Diarrea o estreñimiento.
- Dolor abdominal frecuente.
- Mala absorción de nutrientes.
- Deficiencia de minerales y vitaminas.
Secuelas nerviosas.
- Anomalías electroencefalográficas.
- Algunas áreas del cerebro pueden verse afectadas debido a la dilatación ventricular que experimentan algunos pacientes. Por fortuna, esto puede ser tratado con el paso del tiempo si la persona sigue una dieta especial.
Consecuencias psicológicas y psiquiátricas.
Estas depende de cada paciente, de su personalidad y de cómo haya sido el proceso de recuperación, sin embargo, hay algunas consecuencias que se pueden mencionar porque son bastante comunes en este tipo de complicaciones:
- Trastornos de ansiedad.
- Paranoia.
- Fobias.
- Trastorno obsesivo-compulsivo.
- Psicosis.
- Trastornos psicosomáticos.
- Insomnio y trastornos del sueño.
- Diferentes tipos de psicosis.
Por último, si tienes un familiar o un conocido que creas que está pasando por este tipo de enfermedades, no te asustes y habla con un médico para obtener información correcta sobre cómo afrontar este problema y encontrar la forma de ayudarla. Y, si eres tú quien padece anorexia o bulimia, debes saber que aceptarlo es el primer paso para conseguir salir adelante, no dudes en acudir y hablar con tus amigos y familiares, seguramente encuentres la ayuda que necesitas para volver a estar bien.