Aprende la diferencia entre un ataque cardíaco, un paro cardíaco y un derrame cerebral. Podrías salvar una vida.

Diferencia entre un ataque cardíaco, un paro cardíaco y un derrame cerebral
Ataque cardíaco, infarto, paro cardíaco, derrame cerebral… A menudo, estos términos son utilizados por personas no expertas para indicar qué creen que es más o menos el mismo tipo de problema de salud.
Pero, ¿te has preguntado alguna vez cuál es la diferencia entre ellos? Saber esto implicaría también conocer los síntomas con los que se manifiestan estas enfermedades y, por lo tanto, resultar útil para intervenir rápidamente y quizás marcar la diferencia entre la vida y la muerte.
Infarto (o ataque cardíaco)
Cuando usamos esta palabra, estamos hablando del llamado «infarto de miocardio», es decir, la necrosis (muerte) de una parte del músculo cardíaco, el miocardio, precisamente. Se debe a una prolongada ausencia de flujo sanguíneo, casi siempre debido a la obstrucción de una de las arterias coronarias. Esta obstrucción puede ser de varias magnitudes (transitoria, parcial o total) y causar diferentes daños. El síntoma más común es el dolor torácico intenso que se irradia rápidamente al hombro y a la extremidad izquierda. Una vez más, por supuesto, lo que marca la diferencia es la rapidez con la que se busca ayuda en el hospital.
Paro cardíaco
Consiste en una disfunción cardíaca repentina, en la mayoría de los casos debida a una disfunción eléctrica que provoca una alteración inesperada (si no un cese real) del ritmo de los latidos cardíacos y la consiguiente ineficacia de su mecánica. Es el más grave de los problemas que se presentan porque el tiempo necesario para intervenir con la reanimación cardiopulmonar, salvar a la persona y evitar el daño cerebral es muy corto: diez minutos como máximo. Desafortunadamente, como se mencionó anteriormente, el inicio del paro cardíaco es a menudo sin síntomas, aunque en algunos casos la persona experimenta primero palpitaciones, mareos, disnea, dolor de pecho. En resumen, todo depende de la rapidez de intervención de los socorristas.
Accidente cerebrovascular
El accidente cerebrovascular (o derrame cerebral) difiere del ataque cardíaco y del paro cardíaco en que tiene más que ver con el cerebro. Consiste en una mala irrigación sanguínea al cerebro que causa la muerte de sus células. Existen dos tipos de derrame cerebral: el derrame cerebral isquémico, debido a la falta de flujo sanguíneo, y el derrame cerebral hemorrágico, causado por hemorragias. Los síntomas pueden ser transitorios o permanentes y generalmente consisten en la incapacidad repentina para moverse o percibir una parte del cuerpo, problemas de lenguaje o pérdida de visión de una parte del campo visual. El principal factor de riesgo para el accidente cerebrovascular es la hipertensión.
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