De qué trata el Colon irritable, sus síntomas y posibles causas

El síndrome del colon irritable consiste en un conjunto de trastornos intestinales que pueden volverse crónicos con el tiempo. Sus síntomas principales son el dolor o molestia abdominal, la hinchazón abdominal y la alteración del hábito intestinal (estreñimiento y/o diarrea).
El síndrome del colon irritable es también conocido como el síndrome del intestino irritable, y consiste en una serie de trastornos más o menos intensos que pueden afectar el curso natural y normal de nuestra vida cotidiana.
Esta patología es muy común, especialmente entre las mujeres, y afecta antes de los 35 años; Difícil de diagnosticar ya que no se caracteriza por síntomas específicos.
De hecho, el colon irritable se manifiesta con síntomas muy similares a otros trastornos intestinales; entre estos destacamos:
- hinchazón abdominal
- dolor abdominal bajo
- estreñimiento
- diarrea
- calambres
- dificultad para digerir
- meteorismo
Las posibles causas del síndrome del intestino irritable.
Según los estudios más recientes, las causas de este síndrome pueden ser diferentes y de varios tipos; Entre los desencadenantes encontramos gastroenteritis infecciosa, o problemas a nivel psicológico, hormonal y alimentario.
Aquí están las principales causas:
- estrés
- estados de ansiedad
- Intolerancias agudas a los alimentos, como el gluten o intolerancias a la lactosa.
- uso de drogas
- factores psicológicos
- alteraciones hormonales
- infecciones del tracto intestinal
El síndrome del intestino irritable puede volverse crónico y, como resultado, a menudo puede causar hemorroides debido a estreñimiento o diarrea.
Para comprender si padece esta patología, debe realizarse una colonoscopia o ecografías, pruebas de alergias o intolerancias, hasta pruebas de sangre destinadas a investigar la presencia o ausencia de ciertas patologías a nivel gastrointestinal.
Alimentos que no se recomiendan en caso de colon irritable.
Si padece un colon irritable, es bueno seguir una dieta balanceada y correcta, pero sobre todo, evite ciertos alimentos que pueden ser molestos, como:
- Productos lácteos, desde leche de vaca hasta queso.
- Vegetales, como berenjenas y alcachofas.
- Patatas
- productos que contienen edulcorantes
- Frutas, como los higos, manzanas, peras, plátanos
- Frutos secos, desde almendras hasta nueces.
