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Sexo en trío: esto es lo que debes saber

Un estudio publicado en el Journal of Sexual Archives Researchers, reveló que para muchas personas la idea de tener relaciones sexuales en trío resulta excitante

En términos generales, los hombres suelen sentir temor ante la reacción de su pareja al proponer la idea de un trío. Este patrón refuerza la teoría que sostiene el sociólogo Ryan Scoats, cuyo estudio fue publicado en el Daily Mail, donde se explica que los hombres eligen principalmente amigos varones para compartir esta experiencia tan íntima. Por otro lado, las mujeres tienden a preferir una tercera persona femenina.

¿Cuándo y por qué el sexo en trío es solicitado por la pareja?

Un estudio reciente llevado a cabo en Canadá analizó una implicación psicológica específica en los hombres respecto al sexo en trío. Según el estudio, esta fantasía en hombres se deriva de su predisposición natural a la dominación y al exhibicionismo, lo que explicaría por qué es una práctica más común en el sexo masculino que en el femenino.

Existen diversas motivaciones detrás de la solicitud de un trío. En general, los hombres pueden sentir curiosidad por experimentar algo nuevo y descubrir cosas excitantes que puedan hacer junto a su pareja, especialmente durante los primeros meses de la relación, donde el sexo en trío podría convertirse en una herramienta para conocerse mejor.

Propuesta refrescante

En general, incluso en relaciones de larga duración, el sexo en trío puede ser una propuesta refrescante para romper con la rutina. Es importante tener en cuenta que esto nunca debe implicar sentimientos negativos, como pensar que la idea de los tríos proviene de no ser lo suficientemente atractivo o de ser aburrido en la cama. En este caso, la tercera persona viene a ser un objeto sexual con el que la pareja jugaría tanto como quisiera.

La mayoría de las mujeres eligen tener un trío sexual para satisfacer los deseos de su pareja. Aunque puede ser un comportamiento saludable, también puede ser un intento poco «fisiológico» de no perder al otro, quizás acompañado de un chantaje psicológico, o incluso puede ser visto como manipulación para tener contacto sexual con una persona diferente en un momento de la relación en el que surge ese deseo.

Para muchas mujeres, la experiencia del trío va acompañada de un estado de sumisión que muchas encuentran excitante, mientras que para otras, la idea de tener sexo con una tercera persona está motivada por el deseo de enriquecerse con una experiencia de conocimiento personal o de poner a prueba sus propias habilidades en un contexto de intimidad física con otra mujer.

¿Qué consecuencias trae el sexo en trío?

El sexo en trío no debe ser demonizado, pero tampoco es que se deban dejar de lado las posibles consecuencias emocionales y relacionales que puede traer. Si la pareja está atrapada en sentimientos obsesivos de posesión, celos, envidia, pudor o vergüenza, y no está motivada por una pasión lúdica, la experiencia podría adquirir una connotación negativa.

¿Cómo podemos afrontar la petición de nuestra pareja?

Es importante tener en cuenta que el sexo en trío es una práctica más arriesgada que el coito de solo dos personas debido al intercambio de fluidos corporales, lo que aumenta el riesgo de infecciones de transmisión sexual. Por lo tanto, antes de participar en un trío, es necesario estar convencido, desinhibido y estar dispuesto a exponerse.

El consentimiento y el respeto máximo son esenciales, y es fundamental establecer normas prácticas que no deben romperse bajo ninguna circunstancia para evitar incomodidades y malentendidos. Es importante recordar que siempre tenemos la libertad de decir «no». Conocer al tercer participante y familiarizarse con él antes de la relación es siempre una buena idea, pero al mismo tiempo debe evitarse cualquier implicación sentimental y cualquier forma de romanticismo.

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Dany Levito

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