Fin del mundo: los supervolcanes podrían extinguir la raza humana
Fin del mundo: los supervolcanes podrían extinguir la raza humana.
Entre las posibles causas del fin de nuestra especie, siempre hemos temido a los asteroides, las guerras y las explosiones nucleares, entre otras la posibilidad de catástrofes naturales devastadoras debido al cambio climático. Sin embargo, entre todos los desastres, los supervolcanes nunca nos han preocupado hasta ahora. Pero ¿podemos estar realmente seguros?
Después del riesgo de asteroides lanzado recientemente por la NASA, los científicos han hecho algunos descubrimientos desconcertantes relacionados con los supervolcanes. Su influencia en la vida humana nunca fue realmente considerada, cometiendo una imprudencia que podría costarnos la extinción.
La alarma proviene de la Universidad de Arizona, que se centra en el análisis del antiguo volcán de Yellowstone, inactivo desde hace 70 mil años. Las muestras tomadas llevarían a los científicos a creer que una explosión podría ser casi inminente. Esto contrasta claramente con las primeras suposiciones realizadas. El volcán está cambiando su estado muy rápidamente, arriesgándose a barrer a la raza humana con una erupción.
El Fin del Mundo: El Poder Destructivo de los Supervolcanes preocupa a los Científicos
El volcán Yellowstone es uno de los más peligrosos de la Tierra, dado su antiguo origen. En las proyecciones de los científicos hasta hace unos meses, su actividad debería haber comenzado de nuevo en millones de años, pero las cosas están cambiando rápidamente. A pesar de haber estado inactivo durante 70.000 años, los minerales dentro de su cráter mostrarían un cambio de estado.
El riesgo de extinción en caso de que se produjera un episodio de este tipo sería muy alto, como ha destacado la famosa Dra. Hannah Shamloo. La enorme cantidad de cenizas y escombros haría que nuestro planeta fuera inhóspito. Nuestra atmósfera se oscurecería, impidiendo que los rayos del sol se filtren y lleguen a la superficie de la tierra.
Nuestro ecosistema sufriría entonces cambios que podrían llevar a la Tierra al colapso. Basta pensar en la influencia del Sol sobre las plantas o los animales. Ni siquiera la tecnología que poseemos podría ser suficiente para combatir una situación como ésta.
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