5 frases que nunca debes decirle a una pareja obsesionada con el sexo

Cuando uno de los miembros de la relación tiene un deseo sexual elevado, ciertas palabras pueden causar daño sin que sea tu intención. Por eso, aprender a expresar tus pensamientos con empatía es fundamental para fortalecer el vínculo.
La importancia de hablar sin juzgar
Hablar sobre sexo puede ser incómodo para algunas personas, especialmente si hay diferencias en los niveles de deseo sexual. Sin embargo, comentarios como “Tú solo piensas en eso” pueden ser percibidos como un juicio, ya que este tipo de frase puede despertar sentimientos de culpa o vergüenza en tu pareja, afectando su autoestima.
Una mejor manera de abordar este tema sería decir algo como: “Siento que el sexo es muy importante para ti; ¿podemos hablar sobre cómo equilibrar nuestros deseos?”. Este enfoque no solo muestra empatía, sino también disposición para encontrar una solución juntos.
Evita calificar los deseos como “Anormales”
Llamar a alguien “anormal” por sus deseos sexuales nunca será una buena idea, porque este tipo de afirmaciones pueden herir profundamente, creando distancia emocional. Cada persona tiene formas distintas de vivir la sexualidad, y lo que parece “demasiado” para uno, puede ser natural y saludable para otro.
En lugar de criticar, podrías decir: “A veces me siento un poco sobrepasado/a por tu nivel de deseo, ¿cómo crees que podríamos manejar esto mejor?”. Esta afirmación abre el camino a una conversación constructiva sin ataques personales.
Reconoce las necesidades más allá de lo físico
Si le dices a tu pareja algo como “No soy solo un objeto”, puede parecer que estás minimizando sus intenciones y refuerzas una dinámica de conflicto. En lugar de asumir lo peor, explica lo que necesitas de la relación.
Por ejemplo, podrías expresar: “Me gustaría sentirme más conectado/a emocionalmente, además de físicamente. ¿Podríamos intentar pasar más tiempo haciendo otras actividades juntos?”. Esto fomenta la complicidad sin descuidar el ámbito sentimental.

Cómo abordar la ayuda profesional sin ofender
Frases directas como “Deberías buscar ayuda”, aunque bien intencionadas, pueden sonar humillantes. Si crees que tu pareja podría beneficiarse de hablar con un especialista, opta por un enfoque más compasivo.
Por ejemplo: “¿Alguna vez te has sentido abrumado/a por tus deseos? Si es algo que te preocupa, tal vez podríamos explorar formas de afrontarlo juntos, incluso con ayuda de un profesional.”. Mostrar apoyo en lugar de imponer soluciones hace toda la diferencia.
Expresa frustración sin romper la conexión
En momentos de estrés, frases como “Ya no puedo contigo” pueden salir sin pensar, pero tienen el potencial de causar mucho daño, porque pueden cerrar cualquier posibilidad de reconciliación.
En su lugar, intenta decir algo como: “Esta situación me está costando emocionalmente. Creo que necesitamos trabajar juntos para encontrar un equilibrio.”. Esto te permite expresar tus sentimientos sin alienar a tu pareja.
Cómo mejorar la comunicación en momentos difíciles
Cuando el tema del deseo sexual genera tensiones, es importante crear un espacio para hablar sin miedo al juicio. Usar frases empáticas y evitar culpar a la otra persona puede marcar la diferencia. Piensa en la comunicación como un puente que une el entendimiento y el respeto mutuo.
Para mantener el equilibrio, prioriza la empatía y enfócate en buscar soluciones que se adapten a ambos. Todos tenemos necesidades diferentes, y estos momentos difíciles pueden convertirse en oportunidades para fortalecer el vínculo si se manejan adecuadamente.
Recuerda, lo que dices y cómo lo dices puede marcar la diferencia entre alimentar una conexión o crear barreras emocionales. Usa el diálogo como una herramienta para crecer en pareja, manteniendo el respeto y el amor como pilares fundamentales.