La increíble historia de la pareja que vivió 15 años en Disneyland sin que los visitantes se dieran cuenta
Disneyland es un lugar mágico que atrae a personas de todas las edades. Este famoso parque de atracciones, lleno de diversión, personajes icónicos y emocionantes atracciones, ha dejado huella en la vida de millones de personas alrededor del mundo. Sin embargo, hay una historia fascinante que se esconde en el corazón de Disneyland: la historia de Owen y Dolly Pope, una pareja que logró vivir en el parque durante más de 15 años sin que los visitantes se dieran cuenta.
El sueño de vivir en Disneyland se hizo realidad para Owen y Dolly Pope
La historia de Owen y Dolly Pope en Disneyland comenzó mucho antes de que el parque abriera sus puertas al público en 1955. Walt Disney, el visionario detrás de Disneyland, tenía grandes planes para su parque temático y necesitaba asesoría profesional para llevar a cabo su visión. Fue así como contrató a Owen y Dolly Pope, una pareja dedicada a la crianza de caballos y ponis, para que ayudaran en la creación de las atracciones ecuestres del parque.
Antes de la apertura oficial de Disneyland, los Pope se mudaron al parque en 1951. Durante ese tiempo, vivieron en una casa rodante mientras construían su hogar permanente dentro de Disneyland. A medida que el parque tomaba forma, Owen y Dolly también se encargaban de criar, cuidar y entrenar a los caballos que formarían parte de las atracciones. Su dedicación y experiencia en el manejo de animales los convirtieron en piezas fundamentales para el éxito de Disneyland.
Una vida escondida a simple vista dentro de Disneyland
Durante los años en los que Owen y Dolly Pope vivieron en Disneyland, se convirtieron en los únicos residentes del parque. Mientras los visitantes disfrutaban de las atracciones y se maravillaban con la magia de Disneyland, la pareja llevaba una vida discreta y apasionada dentro de sus límites. Su hogar, ubicado en una zona restringida para el público, se convirtió en su refugio secreto.
La casa de los Pope, conocida como la «Casa de los Papas», era una elegante residencia de 120 metros cuadrados, pintada de blanco y verde. Se encontraba detrás del rancho y estaba abierta al público, pero pocos sabían que esta hermosa casa albergaba a una pareja que vivía su propio sueño dentro de Disneyland. Owen y Dolly se sentían privilegiados de poder disfrutar de la magia del parque todos los días, incluso después del cierre, cuando el lugar se quedaba vacío y tranquilo.
La contribución de Owen y Dolly Pope a Disneyland
La presencia de Owen y Dolly Pope en Disneyland no se limitaba a su vida personal en la Casa de los Papas. Ambos desempeñaban un papel fundamental en el cuidado y entrenamiento de los caballos que formaban parte de las atracciones ecuestres del parque. La Pony Farm, una de las principales atracciones de Disneyland, era responsabilidad de la pareja, quienes se convirtieron en expertos en el manejo de los caballos.
Además de su trabajo con los caballos, participaron en la fabricación de carretas y carruajes utilizados en las atracciones del parque. Su dedicación y habilidades fueron vitales para el funcionamiento y la magia de Disneyland. Durante 15 años, esta pareja vivió una vida de ensueño en el corazón del parque, sin que los visitantes se dieran cuenta de su presencia.
El legado de Owen y Dolly Pope en Disneyland
Después de 15 años de vivir en Disneyland, Owen y Dolly Pope decidieron mudarse a Florida en 1971 para trabajar en el recién inaugurado Tri Circle D Ranch. Esta nueva atracción de Disney se centraba en los caballos y se encargaba de recrear las escenas ecuestres de las películas, como los corceles de la carroza de «Cenicienta». Aunque los Pope se jubilaron en 1975, su contribución a Disneyland continuó siendo reconocida y valorada.
La Casa de los Papas, el hogar que Owen y Dolly habitaron durante su estadía en Disneyland, todavía permanece en el parque como un recordatorio de su historia. Incluso cuenta con una placa conmemorativa en reconocimiento a su valioso papel en la creación y el éxito de Disneyland. Aunque pasaron desapercibidos para la mayoría de los visitantes, su historia es un testimonio de la magia y las oportunidades únicas que Disneyland ha brindado a lo largo de los años.
Disneyland: un lugar de sueños y secretos
La historia de Owen y Dolly Pope en Disneyland es solo uno de los muchos secretos y maravillas que se esconden en el parque. A lo largo de los años, Disneyland ha sido testigo de historias increíbles y ha dejado recuerdos imborrables en la vida de millones de personas. Es un lugar mágico donde los sueños se hacen realidad y donde la magia está presente en cada rincón.
La historia de Owen y Dolly Pope nos recuerda que Disneyland es más que un simple parque de atracciones, es un lugar donde los sueños se hacen realidad y donde la magia está presente en cada momento. A medida que los visitantes caminan por sus calles, pueden imaginar las historias y los secretos que se esconden detrás de cada rincón. Disneyland es un lugar donde la fantasía se encuentra con la realidad, y la historia de Owen y Dolly es solo una de las muchas maravillas que este mágico lugar tiene para ofrecer.
