Se disfraza de su madre muerta (momificada en casa) para seguir cobrando su pensión y lo pillan al renovar el DNI
Hay noticias que parecen un guion de cine, pero son reales. El caso del hombre en Italia que se disfrazó de su madre muerta para renovar su DNI y seguir cobrando su pensión es una de ellas. Ha sorprendido por el disfraz extremo, el engaño prolongado y el hallazgo final en su casa.
Todo ocurrió en Borgo Virgilio, un municipio cercano a Mantua, en el norte de Italia. Allí, un hombre de 57 años, enfermero y desempleado, intentó hacerse pasar por su madre, Graziella Dall’Oglio, fallecida en 2022, para actualizar su documento de identidad y mantener el flujo de dinero que recibía a su nombre.
El protagonista del caso acudió al ayuntamiento de Borgo Virgilio vestido como si fuera su madre. Llevaba peluca, maquillaje, las uñas pintadas, un collar de perlas y pendientes, intentando imitar el aspecto de una mujer mayor.
Su objetivo era renovar un DNI caducado desde hacía más de diez años. Ese documento era clave para seguir moviendo gestiones en nombre de su madre y mantener los cobros a su favor. Sin embargo, algo no encajó desde el primer momento.
Los funcionarios que lo atendieron se dieron cuenta de que la persona frente a ellos no parecía una anciana, sino un hombre disfrazado. El cuello, la complexión física y la manera de caminar despertaron dudas inmediatas, así que avisaron a la policía.
Cómo lo descubrieron
La policía llegó al ayuntamiento y pidió al supuesto anciano que acudiera a comisaría para continuar el trámite. Una vez allí, las incoherencias en sus respuestas y su aspecto poco convincente hicieron caer el teatro.
Finalmente, el hombre confesó que no era Graziella, sino su hijo. A partir de esa admisión comenzó a destaparse un fraude continuado que llevaba años en marcha.
Un fraude de pensión llevado al extremo
Según las primeras estimaciones, el hombre habría seguido cobrando la pensión de viudedad y los ingresos de las propiedades de su madre durante unos tres años. La cantidad rondaría los 53.000 euros al año, una suma muy alta para una economía familiar.
Para mantener ese dinero, decidió seguir fingiendo que su madre estaba viva. No solo no comunicó su fallecimiento, también gestionó sus bienes como si nada hubiera pasado. El DNI renovado era una pieza más de ese engaño dirigido a la Seguridad Social italiana.
El macabro hallazgo en la casa familiar
Cuando los agentes registraron la vivienda, encontraron algo todavía más escalofriante. En la casa estaba el cuerpo momificado de Graziella Dall’Oglio, escondido en dos sacos de dormir y envuelto en sábanas.
La madre habría muerto por causas naturales, pero el hijo nunca informó a nadie. Conservó el cadáver para sostener en el papel la idea de que seguía viva y seguir cobrando. Este hallazgo convirtió el caso en un asunto todavía más impactante para la opinión pública.
El hombre se enfrenta a posibles cargos por ocultación de cadáver, porque mantuvo el cuerpo escondido en su casa, y por suplantación de identidad, al hacerse pasar por su madre en el ayuntamiento. También podría ser juzgado por estafa a la Seguridad Social, al cobrar pensiones que no le correspondían, y por falsedad documental, al intentar tramitar un DNI con datos que ya no eran reales.
