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Cocina, recetas y alimentos

11 alimentos sorprendentes que puedes congelar y aprovechar al máximo

El día de hoy te daremos una lista de alimentos que seguramente no tenías idea de que podían almacenarse por medio del frio

¿Sabías que existen muchos alimentos que se pueden congelar y que pueden ser de gran utilidad en tu cocina? Más allá de congelar agua en cubiteras, hay otras opciones ingeniosas que te permitirán aprovechar al máximo los alimentos y evitar el desperdicio. Congelarlos en el momento adecuado te permitirá disfrutar de ellos durante más tiempo. Aquí te presento 11 alimentos que tal vez nunca pensaste que podrías congelar, pero que te serán de gran ayuda:

Aceite de oliva con hierbas

Si te gusta darle un toque aromático a tus preparaciones, congela aceite de oliva con hierbas frescas como romero, tomillo o laurel. De esta manera, siempre tendrás a mano cubitos aromáticos listos para usar en tus platos. Recuerda que es importante congelar los alimentos cuando están frescos y utilizarlos dentro de los 3 a 6 meses posteriores a la congelación.

Café

¿Te sobró café y no quieres desperdiciarlo? Vierte el café sobrante en una cubitera y luego recoge los cubitos en un recipiente. De esta forma, evitarás beber café diluido. Puedes congelarlo caliente o frío sin que altere su sabor, pero ten en cuenta que los alimentos calientes pueden dañar el congelador, así que espera un poco a que se enfríe antes de congelarlo.

Yogur

Aunque suene extraño, el yogur también se puede congelar. Si haces batidos y el hielo se derrite rápidamente, prueba a hacer cubitos de hielo con yogur en lugar de utilizar cubitos de agua. Congela el yogur tan pronto como lo compres para evitar que se agrie, o utilízalo congelado en la preparación de postres que requieran cocción en el horno.

Decoraciones para cócteles

Para agregar color y originalidad a tus cócteles, congela hierbas, flores comestibles o trozos de fruta en cubiteras cubriéndolos con agua. Una vez que el hielo se derrita, se mezclarán con la bebida, dándole un toque especial. Puedes probar con palitos de hielo con lavanda, rosa u otras hierbas para añadir un delicado aroma provenzal.

Vino sobrante

Si te quedó vino sin terminar, no lo desperdicies. Viértelo en cubiteras y utilízalo posteriormente para cocinar, hacer sangría o preparar vino caliente. El vino puede conservarse en el congelador hasta 6 meses y también puedes utilizar el congelador para enfriarlo rápidamente envolviendo la botella en papel mojado y metiéndola en el congelador.

Zumo de limón

Exprime limones y vierte el zumo en bandejas de cubitos de hielo. Los cubitos de zumo de limón son perfectos para aromatizar el agua y se conservarán por más tiempo congelados. Para utilizarlos, simplemente sácalos del congelador la noche anterior o derrítelos en el microondas.

Agua de coco

El agua de coco es una bebida refrescante y rica en electrolitos. Congélala en cubiteras y disfrútala con un poco de agua tónica para tener siempre a mano una bebida hidratante y energizante. Los cubitos de agua de coco deben consumirse dentro de los 60 días posteriores a su congelación.

Chocolate negro

Derrite chocolate negro junto con leche de almendras, cacao en polvo y extracto de vainilla. Luego, congélalo en bandejas. Puedes disfrutarlo solo, en batidos o añadiéndolo a tu café o chocolate caliente. Evita los cambios bruscos de temperatura para mantener su textura y sabor.

Ajo y jengibre picados

Para los amantes de la cocina asiática, congela cubitos de ajo y jengibre picados. Estos ingredientes conservarán su sabor y podrás utilizarlos para preparar bebidas añadiendo limón. Se dice que la combinación de ajo, jengibre y limón tiene propiedades antiinflamatorias y antioxidantes beneficiosas para la salud.

Claras de huevo

Si sueles utilizar solo las yemas en tus recetas, congela las claras para evitar desperdiciarlas. Mezcla las claras y congélalas dejando un poco de espacio entre la mezcla y la tapa del recipiente, ya que aumentarán de volumen durante la congelación. Las claras crudas congeladas conservan su sabor, pero no es recomendable congelarlas cocidas, ya que perderían propiedades organolépticas.

Fresas cubiertas de chocolate

Esta deliciosa y romántica opción es perfecta para ocasiones especiales. Lava las fresas y sumérgelas en chocolate negro derretido. Luego, congélalas en cubiteras hasta que el chocolate se solidifique. Puedes disfrutarlas solas o acompañarlas con helado para obtener una combinación irresistible.

Además, no olvides que congelar la comida para bebés es una excelente manera de ahorrar tiempo y conservar los nutrientes necesarios. Asegúrate de enfriar los alimentos antes de congelarlos y utiliza recipientes de una sola ración para facilitar su posterior consumo.

Recuerda etiquetar cada recipiente para identificar fácilmente su contenido y aprovecha al máximo estos alimentos congelados. Con un poco de planificación, podrás disfrutar de sabores frescos y evitar el desperdicio de alimentos en tu cocina.

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Dany Levito