Deterioro en el cartílago de la rodilla: ¿Qué es y cómo tratarlo?
El cartílago es el revestimiento que cubre y protege nuestras articulaciones de posibles lesiones
Como ya lo mencionamos, el cartílago ese revestimiento que, similar a lo que ocurre con el esmalte, cubre y protege nuestras articulaciones, incluida, por supuesto, toda el área de nuestras rodillas. Sin la presencia de cartílagos no sería posible una serie de funciones, incluido el movimiento, motivo por el que no es difícil imaginar la importancia que esta parte de nuestro cuerpo representa para nuestro bienestar a mediano y largo plazo si no queremos tener problemas de movilidad. Sin embargo, con el paso de los años y la llegada del envejecimiento o como consecuencia de un traumatismo severo, puede pasar que el cartílago comienza a deteriorarse y a perder algunas de sus funciones, esto es explicado por la profesora Elizaveta Kon, jefa de la Sección de Ortopedia Traslacional del Centro Humanitas de Reconstrucción de Rodilla y profesora de la Universidad Humanitas, en un artículo publicado recientemente en Humanitas Health.
Deterioro del cartílago: ¿Cuáles son las causas más comunes?
La profesora Kon explica: “El cartílago puede deteriorarse debido a la presencia de problemas relacionados con la edad, como por otras razones fisiológicas, algunas de estas son el uso excesivo de las articulaciones, demasiada actividad física o, por el contrario, muy poca, o una condición de sobrepeso que se ha salido de control, este último aspecto, es el que generalmente más influye en la salud y el metabolismo de las articulaciones. A todo estos factores de riesgo se le deben sumar la predisposición a lesiones repentinas, la cuales pueden producirse a cualquier edad. La cirugía previa, especialmente la extirpación del menisco también es una causa frecuente de deterioro del cartílago”.
Rigidez e hinchazón: los síntomas generales del deterioro de cartílago
El experto continúa: «El cartílago es solo un elemento de toda una articulación, por lo que los problemas que lo afectan son de un carácter más amplio. Por lo tanto, es fundamental tratar todos los aspectos de la patología que pueda tener el paciente, el cual debe ser objeto de seguimiento teniendo en cuenta lo que aparezca en su historial médico completo. Los síntomas más comunes que indican un posible deterioro del cartílago son una sensación de rigidez e hinchazón en las rodillas. Este es un síntoma que puede afectar a una persona mayor que ya sufre artrosis, pero también a un joven que ha sufrido una lesión deportiva por un accidente severo. Pese a que la causa sea diferente, las consecuencias pueden ser las mismas».
Infiltración biológica: una nueva vía de tratamiento
A excepción de aquellos casos en los que es necesaria una cirugía para sustituir la articulación, las terapias más habituales para tratar un cartílago deteriorado son las infiltraciones, por ejemplo con ácido hialurónico, que sirven para lubricar la articulación y mejorar su funcionamiento. Pero, también hay infiltraciones biológicas, que, a diferencia de las farmacológicas, se realizan con concentrados de tejidos y células de nuestro propio organismo, las cuales son mínimamente modificadas, como los factores de crecimiento sanguíneo o las células madre.
El experto explica y concluye: “Las infiltraciones biológicas no causan dolor y son especialmente útiles para frenar el avance del deterioro del cartílago, sin embargo, en presencia de una artrosis severa, cuando la articulación ya se encuentra muy comprometida, es necesario recurrir a la cirugía protésica. Es muy importante dejar en claro que, cuando se habla de infiltraciones, lo mejor es remitirse únicamente a centros autorizados, ya que se trata de una terapia que solo debe ser realizada por especialistas».
