¡Ojo! Estas son las enfermedades que pueden transmitir las palomas
Muchas personas las adoran y apartan migajas para alimentarlas, mientras que hay otros que sienten verdadera repulsión hacia ellas y las ven como "pájaros invasores" que solo portan enfermedades
Ya se ha comprobado que son varias las enfermedades que las palomas pueden transmitir a los humanos, y a continuación te explicaremos cuáles son y cómo protegerte de ellas.
Las enfermedades más comunes transmitidas por las palomas
El excremento es el principal responsable de la mayoría de las enfermedades que transmiten las palomas, ya que contienen numerosos agentes infecciosos que pueden ser hongos, virus o bacterias. Cuando estos agentes se secan, los excrementos se esparcen por el aire en forma de polvo o micropartículas que pueden causar enfermedades al entrar en contacto con los seres humanos por medio de la respiración.
Las enfermedades que se transmiten dependen del tipo de patógeno, la edad y el estado de salud de la persona infectada, además del estado de su sistema inmunitario. Por lo tanto, los niños, los ancianos y los enfermos son más propensos a contraer algunas de las enfermedades transmitidas por las palomas.
Estas aves pueden transmitir más de 40 enfermedades diferentes; veamos las más comunes:
- Histoplasmosis: es una enfermedad que se caracteriza por atacar al sistema respiratorio y puede causar graves daños en los pulmones si no se reconoce y se trata a tiempo. Los principales síntomas son fiebre, escalofríos, tos y dolor en el pecho.
- Clamidiosis: es una bacteria propia de las aves que se propaga a través del polvo de las heces provocando ornitosis.
- Colibacilosis: es la enfermedad causada por la bacteria Escherichia coli, esta también se produce en el intestino humano y se manifiesta con fiebre, diarrea y hemorragias cutáneas.
- Salmonelosis: esta aparece cuando los excrementos de las palomas infectan los alimentos que luego ingieren los humanos.
- Encefalitis de San Luis: es una enfermedad grave que inflama el sistema nervioso. Los primeros síntomas son somnolencia, fiebre y dolor de cabeza. Si no se trata adecuadamente, puede causar parálisis, coma e incluso el fallecimiento del paciente. Los casos más graves se registran en personas con enfermedades de base o mayores de 50 años.
- Alveolitis alérgica: Conocida como pulmón de colombófilo, también puede ser transmitida por otros animales. Con esta enfermedad los alvéolos de los pulmones se van inflamando poco a poco, ya que se vuelven muy sensibles a las heces o plumas de las palomas. Puede dejar serios efectos secundarios si no se trata adecuadamente.
- Neumoencefalitis: es una enfermedad que afecta al sistema respiratorio, al sistema nervioso y a los intestinos, los primeros síntomas son conjuntivitis y congestión nasal.
Otras enfermedades menos comunes
Además de las enfermedades que ya hemos mencionado, hay otras igualmente importantes pero menos comunes. A continuación veremos algunas de ellas:
- Listeriosis.
- Tuberculosis aviar.
- Fiebre paratifoidea.
- Aspergilosis.
- Criptococosis.
- Toxoplasmosis.
- Psitacosis.
Los expertos calculan que alrededor del 30 % de las palomas que habitan en las ciudades portan algún tipo de enfermedad. Como ya lo mencionamos, esta tasa es desencadenada por los entornos tan insalubres en los que viven y a lo que comen: basura, excrementos de otros animales y otras sustancias nocivas para la especie humana.
¿Cómo prevenir las enfermedades transmitidas por las palomas?
- Lo principal es mantener la manda o bandada de estas aves bajo control. Para esto, la mejor alternativa es reducir la cantidad de alimento para que no se alojen en el lugar.
- Si limpias las zonas donde viven las palomas y sus excrementos, utiliza siempre guantes desechables y una mascarilla.
- Moja la zona donde se encuentran los excrementos con abundante agua para que no se sequen y se conviertan en polvo.
- No te acerques a las bandadas de palomas si estás enfermo o tienes un sistema inmunológico débil.
- Acude a las autoridades municipales para que realicen controles veterinarios y sanitarios orientados a evitar la propagación y superpoblación de palomas.
Pese a los antes expuesto, hay que decir que los estudios más recientes son tranquilizadores, ya que, aunque estas aves puedan ser portadoras de enfermedades e infecciones, las pruebas llegan a la conclusión de que no representan un peligro excesivo para la salud humana.
