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Belleza

7 consejos para mimar tu cabello en verano

El verano puede ser una temporada difícil para el cabello. El sol, el cloro de las piscinas y la sal del mar hacen que la fibra capilar pierda su brillo natural y se vuelva más frágil. Muchas melenas lucen opacas y quebradizas después de meses de calor y exposición. Por eso, mimar el cabello en verano no es un lujo, sino una necesidad para mantenerlo sano y lleno de vida. Proteger, hidratar y cuidar el cuero cabelludo se vuelve clave para evitar la sequedad, la decoloración y el daño por agentes externos.

Reforzar la hidratación y protección frente al sol

El calor y la radiación solar afectan profundamente a la estructura del cabello. Los rayos UV descomponen la queratina, provocando sequedad, fragilidad y pérdida del color, sobre todo en cabellos teñidos. Por este motivo, hidratar el cabello frecuentemente no solo restaura suavidad sino que crea una barrera protectora.

Las mascarillas nutritivas, los aceites capilares y los protectores solares capilares se convierten en aliados esenciales durante el verano. Elegir productos ricos en ingredientes naturales, como la manteca de karité o aceites como el de coco o argán, ayuda a reponer los lípidos perdidos y mantener la hidratación desde el interior de la fibra capilar. Usar un protector solar específico previene los daños mientras disfrutas del sol.

Rituales de hidratación profunda en verano

La hidratación debe intensificarse en los meses de calor. Aplicar mascarillas y aceites revitalizantes dos o tres veces por semana aporta al cabello nutrientes esenciales para soportar el clima. Es importante preferir fórmulas sin sulfatos ni sustancias agresivas, que pueden resecar aún más el cuero cabelludo y la fibra capilar.

Un ritual sencillo comienza con un buen lavado, seguido de una mascarilla reparadora, y finaliza con unas gotas de aceite en las puntas. El cabello mojado absorbe mejor los beneficios y recupera flexibilidad y brillo. Mantener estas rutinas durante todo el verano ayuda a conservar la humedad, incluso después de la exposición a la playa o piscina.

Foto Freepik

Los mejores productos para proteger el cabello del sol, cloro y sal

El mercado ofrece múltiples opciones para defender la melena de la sequedad y el daño. Los sprays solares con filtros UV forman una capa protectora contra el sol, evitando la pérdida de color y la deshidratación. Los aceites capilares como el de argán o chía destacan por su acción antioxidante y poder restaurador del brillo natural.

Entre los más valorados, los sprays bifásicos y los acondicionadores sin aclarado pueden aplicarse en seco o húmedo, protegiendo el cabello contra el cloro y la sal. Sus fórmulas incluyen activos como vitamina E, aloe vera y provitamina B5, esenciales para fortalecer la fibra mientras suavizan el encrespamiento. Para cabellos teñidos, existen soluciones especializadas que prolongan la intensidad del color y evitan la decoloración, incluso tras largas horas bajo el sol.

Cuidados diarios y rutinas para minimizar daños

Cambiar algunos hábitos cotidianos refuerza la salud capilar en plena temporada estival. Empezar por una buena higiene, peinados inteligentes y reducir el uso de calor puede marcar la diferencia.

Limpieza y lavado adaptados a la temporada

El cabello necesita un lavado adaptado al clima y al tipo de exposición. Optar por champús suaves o sin sulfatos mantiene la barrera natural del cuero cabelludo y evita la sequedad excesiva. Enjuagar con agua fría tras ir a la playa o piscina ayuda a sellar la cutícula, elimina residuos y reduce la absorción de agentes dañinos.

Después de cada baño en el mar o piscina, aplicar una mascarilla hidratante devuelve los minerales y previene la deshidratación. Incorporar productos con extractos naturales potencia la reparación y calma las irritaciones provocadas por el sol y el cloro.

Peinados, cortes estratégicos y reducción del uso de calor

El verano invita a dejar atrás las herramientas térmicas. Secar el cabello al aire y evitar la plancha o tenacilla reduce el riesgo de daño. Es preferible optar por peinados sueltos o trenzados suaves, ya que protegen la fibra del sol y evitan la rotura mecánica.

Cortar las puntas antes y después del verano elimina las zonas más castigadas y favorece un crecimiento uniforme. Los recogidos con pañuelos o gomas suaves también previenen heridas y fortalezas y añaden un toque fresco y estiloso a cada look.

El papel del cuero cabelludo y tratamientos complementarios

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Un cuero cabelludo sano es la base de una melena luminosa. Exfoliarlo una vez a la semana elimina células muertas, restos de productos y exceso de grasa, dejando el folículo libre para crecer vigoroso. Usar tratamientos con vitaminas y queratina fortalece la fibra capilar, aportando resistencia y elasticidad frente a las agresiones externas.

Las ampollas reparadoras y mascarillas con aminoácidos nutren en profundidad, revirtiendo el daño y devolviendo la vitalidad. En esta época, incluir fórmulas ligeras que no saturen el cabello ni generen grasas indeseadas es clave para mantener un cuero cabelludo fresco y motivar un crecimiento sano durante y después de la temporada de calor.

Adoptar estas prácticas e incorporar productos que respondan a las necesidades del cabello bajo el sol asegura una melena saludable, brillante y llena de movimiento durante todo el verano.

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