El truco viral de 5 minutos para aliviar el dolor de cabeza sin medicamentos
Cuando el dolor de cabeza aprieta, la mente busca un botón de pausa. En los últimos meses se ha hecho viral un truco de 5 minutos que promete alivio sin pastillas, con un automasaje breve en cabeza y cuello. Se trata de una técnica sencilla que puede hacerse sentado o tumbado, en un lugar tranquilo y con luz baja. No sustituye una valoración médica y suele funcionar mejor cuando el dolor es de tipo tensional, el típico “casco” de presión tras pantallas, estrés o mala postura.
Qué es el truco viral de 5 minutos y para qué tipo de dolor de cabeza sirve
El truco consiste en un automasaje corto en sienes, frente y base del cráneo, zonas donde se acumula tensión muscular. Se popularizó en TikTok e Instagram en vídeos de divulgación sanitaria, incluida la explicación de un neurólogo, como una forma de relajar tejidos y cambiar el foco del dolor, sin venderlo como cura.
Suele encajar con la cefalea tensional: presión bilateral, sensación de rigidez, cuello cargado y hombros elevados, como si la cabeza llevara una mochila invisible. También puede ayudar cuando hay mandíbula apretada o bruxismo, porque esa tensión sube por las sienes. En cambio, si la persona nota un dolor nuevo, raro o incapacitante, conviene no asumir que es “solo estrés”.
Cuándo no hacerlo y señales de alarma para consultar
Si aparece un dolor súbito y muy intenso, fiebre, rigidez de cuello marcada, confusión, debilidad, visión doble, tras un golpe en la cabeza, en embarazo con dolor nuevo, si empeora cada día, o si hay migraña fuerte que no cede, toca consultar con un profesional. Ante la duda, es mejor pedir valoración sanitaria.
Cómo hacer el automasaje en 5 minutos paso a paso, sin complicaciones
La persona se coloca con la espalda apoyada, hombros sueltos y la barbilla ligeramente recogida. La regla es simple: presión suave pero firme, sin provocar dolor. Si duele, se baja la intensidad. Durante todo el proceso conviene mantener respiración lenta, como si se soplara una vela sin apagarla.
Primero se trabaja la zona de sienes con movimientos lentos y regulares, sin prisa. Después se pasa a la frente, alisando la tensión hacia fuera. El cierre se hace en la base del cráneo, justo donde el cuello se une con la cabeza, un punto que muchas personas notan “cerrado” tras muchas horas de pantalla.
Sienes y temporal, el punto donde suele empezar la tensión
Se apoyan dos o tres dedos en el lateral de la cabeza, a la altura de las sienes, y se hacen círculos lentos. Luego se sube un poco hacia la zona temporal alta y se repite. Puede haber sensibilidad, pero no debería doler. Si la persona aprieta los dientes, esa zona suele estar cargada y el masaje se nota como aflojar un nudo pequeño.
Frente y base del cráneo, el cierre que más alivia
Se masajea la frente desde el entrecejo hacia arriba y hacia los lados, como si se “plancharan” arrugas de tensión. Después los dedos van a la unión cráneo-cuello y se presiona con círculos suaves, alternando ambos lados. Para terminar, se hacen varias respiraciones profundas y lentas, dejando caer los hombros.
Cómo potenciar el alivio sin medicamentos y evitar que el dolor vuelva
Para que el efecto dure, ayuda beber agua y bajar estímulos, con luz tenue y una pausa real de pantallas. Un estiramiento suave de cuello, sin rebotes, suele mejorar la rigidez. También cuenta la postura: si la cabeza va adelantada, el cuello paga la factura.
Se puede combinar con un paño frío en la frente si hay sensación de calor, o con calor local en la nuca si predomina la contractura. Si la tensión reaparece, el automasaje puede repetirse más tarde, siempre que no haya molestia ni signos de alarma.
Cuando el dolor es leve o moderado, este gesto de cinco minutos puede ser como aflojar el nudo de una corbata demasiado apretada. La clave está en escuchar el cuerpo, ir suave y ser constante. Si los dolores se vuelven frecuentes, cambian de patrón o asustan, lo sensato es buscar ayuda y no normalizarlos. Calma y regularidad suelen ser el mejor punto de partida.