Deportes para diabéticos: cuáles practicar y las precauciones a seguir

La actividad física es esencial para las personas con diabetes, ya que ayuda a controlar los niveles de glucosa, fortalece el corazón y mejora el bienestar general. Sin embargo, no todos los deportes son igualmente recomendables para todos los casos, y es importante seguir ciertos cuidados especiales antes, durante y después de realizarlos con el fin de evitar desarrollar efectos secundarios contraproducentes.
Beneficios del ejercicio físico en diabéticos
Hacer ejercicio con regularidad aporta numerosos beneficios a quienes padecen diabetes. Entre los más destacados podemos encontrar:
Control de los niveles de azúcar en sangre: el ejercicio utiliza glucosa como combustible, reduciendo sus niveles en el cuerpo.
Sensibilidad a la insulina: mejora la capacidad del cuerpo para usar la insulina de manera más eficiente.
Mejora cardiovascular: reduce el riesgo de enfermedades del corazón, comunes en personas diabéticas.
Manejo del peso: ayuda a prevenir el exceso de peso, ligado al aumento de la resistencia a la insulina.
Salud mental: además, disminuye el estrés y mejora el estado de ánimo.
¿Cuáles deportes son adecuados para diabéticos?
Existen diversas actividades físicas que son eficaces y muy seguras para personas que padecen de diabetes. Estas son algunas de las más recomendadas:
Caminar
Una caminata diaria de al menos unos 30 minutos puede marcar una gran diferencia en la salud general. Caminar mejora la circulación y no requiere de equipo ni de habilidades especiales.
Natación
Practicar natación reduce el impacto de la actividad física sobre las articulaciones y permite un trabajo muscular completo. Además, es perfecta para quienes tienen problemas articulares o de sobrepeso.
Ciclismo
El ciclismo, ya sea al aire libre o con ayuda de una bicicleta estática, fortalece el estado del sistema cardiovascular y es una alternativa ideal para quienes quieren evitar deportes de alto impacto.
Yoga
Además de mejorar la flexibilidad y fortalecer los músculos, el yoga tiene la capacidad de ayudar a reducir los niveles de estrés, siendo este un factor importante para mantener los niveles estables de glucosa.

Entrenamiento con pesas
Optar por levantar pesas o realizar ejercicios de resistencia tiene la capacidad de aumentar la masa muscular, favoreciendo el uso de la glucosa en el organismo.
Deportes en equipo
Considerar actividades como el fútbol o el voleibol no solo son divertidas, sino que promueven la socialización y el ejercicio aeróbico, puesto que se ejercita la totalidad del cuerpo.
Precauciones antes de realizar ejercicio
Antes de elegir una actividad física, es fundamental tener en cuenta ciertos aspectos específicos de la diabetes:
Consulta médica previa: un médico o especialista debe evaluar el estado de salud general y dar recomendaciones individualizadas.
Revisar los niveles de glucosa: medir la glucosa antes de iniciar el ejercicio es crucial. Si está demasiado baja o muy alta, es mejor posponer la actividad.
Hidratación constante: el ejercicio puede causar deshidratación, lo que complica el control de la glucosa. Beber agua antes, durante y después del ejercicio es indispensable.
Utilizar calzado adecuado: el pie diabético es una preocupación real, por lo que usar zapatos cómodos y bien ajustados reduce el riesgo de lesiones.
Evitar horarios extremos: es preferible evitar entrenar en horas de mayor calor o frío para prevenir complicaciones.
Recomendaciones durante y después del ejercicio
Monitorear la glucosa: durante sesiones prolongadas, es recomendable pausar cada cierto tiempo para medir los niveles de azúcar.
Llevar alimentos por precaución: tener a mano bebidas azucaradas o snacks que sirvan de recurso en caso de hipoglucemia.
Ropa cómoda y transpirable: además de protegerse del sudor, mantendrá la piel en mejores condiciones.
Chequeo post-ejercicio: vigilar posibles señales de hipoglucemia o fatiga anormal tras concluir la actividad.
Errores comunes al hacer ejercicio como diabético
A pesar de los beneficios del deporte, algunos errores pueden generar problemas:
Ejercicio excesivo sin preparación: entrenar más de lo recomendado puede llevar a lesiones o descompensaciones.
Saltarse comidas: algunos creen que entrenar en ayunas ayuda, pero en diabéticos aumenta el riesgo de hipoglucemia.
Ignorar el dolor o molestias: es clave escuchar al cuerpo para evitar complicaciones mayores.
En este sentido, la actividad física regular es una herramienta poderosa para controlar y prevenir complicaciones de la diabetes. Sin embargo, debe practicarse con responsabilidad y planificación. Cualquier deporte o actividad puede adaptarse a las necesidades del paciente, siempre que cuente con supervisión médica. Con los cuidados correctos, el ejercicio no solo mejora la salud física, sino que también contribuye a un mayor bienestar emocional.