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Salud

¿Estás pensando en una ligadura de trompas? Esto es lo que debes saber

Tomar la decisión de no tener más hijos puede sentirse abrumador. Por eso, la ligadura de trompas, como método anticonceptivo permanente, suele considerarse una opción relevante para quienes buscan cerrarle la puerta al embarazo de manera definitiva. Antes de tomar este paso tan significativo, es fundamental tener claro cómo funciona, sus ventajas, riesgos y todo lo que implica este procedimiento. Con información clara se puede decidir de manera más segura y tranquila.

¿Qué es la ligadura de trompas y cómo funciona?

La ligadura de trompas es una cirugía en la que se bloquean, cortan o extirpan las trompas de Falopio. Su función es impedir que los óvulos viajen desde los ovarios hacia el útero, haciendo que el embarazo no pueda ocurrir. Hay distintos métodos quirúrgicos para realizarla. El más común es la laparoscopia, donde se hacen pequeñas incisiones en el abdomen para llegar hasta las trompas y cerrarlas. Otras técnicas incluyen la minilaparotomía, más frecuente tras el parto, y el procedimiento durante la cesárea, cuando se aprovecha la cirugía abdominal ya abierta.

En algunos casos, se usan anillos, clips o cauterización para cerrar las trompas. Otra opción, menos frecuente hoy en día, es el método Essure, que induce una cicatriz natural dentro de la trompa, pero ha perdido popularidad en los últimos años. Cuando se realiza la extirpación completa de las trompas (salpingectomía bilateral), además del efecto anticonceptivo, hay estudios que indican una reducción del riesgo de ciertos tipos de cáncer de ovario.

Este método no es temporal ni reversible en la mayoría de los casos. Aunque hay cirugías para intentar restaurar la fertilidad, no garantizan el éxito. Por eso, la ligadura debe considerarse como permanente. Si aún existe alguna duda sobre no querer más hijos, conviene pensar en métodos anticonceptivos reversibles de larga duración como el DIU o el implante.

En cuanto a la efectividad, la ligadura de trompas alcanza porcentajes superiores al 98%, considerándose uno de los métodos anticonceptivos más seguros. Sin embargo, ningún procedimiento es perfecto y, aunque es poco común, pueden ocurrir fallas que resulten en un embarazo, normalmente una de cada 200 mujeres puede tener una recanalización espontánea de las trompas.

Foto Freepik

Ventajas, riesgos y recuperación después del procedimiento

La principal ventaja de la ligadura de trompas es la anticoncepción altamente efectiva sin necesidad de preocuparse por tomar pastillas o usar otros métodos. La cirugía no altera las hormonas, por lo que los ciclos menstruales y el funcionamiento de los ovarios permanecen igual. Las mujeres siguen ovulando y tendrán su periodo como antes, lo que puede ser un alivio para quienes buscan mantener la regularidad de sus ciclos.

El proceso de recuperación suele ser rápido. La mayoría de las pacientes pueden regresar a sus actividades cotidianas en una o dos semanas, dependiendo del tipo de cirugía. Cuando la intervención se realiza durante una cesárea, la recuperación sigue los tiempos habituales de una cirugía abdominal mayor, mientras que la laparoscopia permite una reincorporación mucho más ágil.

Como en cualquier cirugía, existen riesgos asociados. Puede haber infecciones, sangrado, lesiones en órganos cercanos o reacciones adversas a la anestesia. El riesgo de complicaciones graves es bajo, aunque nunca nulo. Algunas mujeres pueden experimentar dolor abdominal o fatiga durante los primeros días tras la cirugía.

Un aspecto crucial a considerar es el arrepentimiento. No es habitual, pero ocurre. Las circunstancias y deseos personales pueden cambiar con el tiempo. Volver a conectar las trompas puede requerir una cirugía costosa y compleja, con posibilidades de éxito variables. En otros casos, la única forma de buscar un embarazo es mediante técnicas de reproducción asistida como la fecundación in vitro (FIV), que también es costosa y no garantiza el embarazo.

La ligadura de trompas no protege contra infecciones de transmisión sexual. Para la protección frente a enfermedades como el VIH, se recomienda seguir usando preservativo.

La edad y el momento también influyen en la toma de decisiones. Las mujeres menores de 30 años tienen una mayor probabilidad de arrepentimiento en el futuro, así que no se recomienda tomar decisiones bajo presión emocional o en situaciones estresantes.

En comparación con la ligadura de trompas, la vasectomía es el procedimiento de esterilización para hombres. Suele ser menos invasiva, más económica y con una recuperación más rápida. Es importante discutir en pareja cuál es la mejor opción, sin presiones externas, priorizando siempre lo que beneficie a cada quien.

Hablar con un profesional de la salud de confianza es un paso esencial. Un médico puede ayudar a aclarar dudas, explicar alternativas y acompañar durante todo el proceso de decisión. También pueden guiar en la elección del mejor momento y del tipo de procedimiento más apropiado según cada caso.

Al entender a fondo en qué consiste la ligadura de trompas, sus efectos y sus consecuencias, se puede tomar una decisión consciente para el futuro reproductivo. Reflexionar sin prisa y considerar las alternativas permitirá que cada persona escoja lo mejor, priorizando siempre su bienestar y autonomía.

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