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Sexo y relaciones

Estas son las mejores posiciones para el sexo matutino

Comenzar el día con sexo va mucho más allá de un simple placer físico. Está demostrado que el sexo matutino puede mejorar el ánimo, disparar la productividad y aportar una sensación de bienestar duradera. Las horas de la mañana, llenas de naturalidad y espontaneidad, ofrecen el mejor escenario para fortalecer la conexión en pareja. Elegir posiciones adecuadas no solo hace la experiencia más cómoda, sino que ayuda a aprovechar todos estos beneficios, creando una rutina que enriquece la vida diaria juntos.

Beneficios únicos del sexo en la mañana

El sexo a primera hora potencia la energía para enfrentar cualquier reto. Tras el descanso nocturno, el cuerpo alcanza su punto más alto de energía y las hormonas, en especial la testosterona en los hombres, están en su nivel óptimo. Esto favorece el deseo y la facilidad para iniciar el encuentro. La liberación de endorfinas y otras hormonas asociadas con el bienestar ayuda a mantener una actitud positiva todo el día, bajando el estrés y aliviando tensiones acumuladas.

Hacer el amor en este momento también fortalece el vínculo emocional. La ausencia de distracciones y la cercanía física alimentan la sensación de complicidad. La espontaneidad propia de la mañana, cuando no hay tiempo para preparativos o juegos prolongados, convierte el sexo matutino en un acto íntimo que se siente genuino, natural y profundamente satisfactorio.

Las mejores posiciones para vivir el sexo matutino al máximo

Las posiciones recomendadas para el sexo matutino priorizan la comodidad, la cercanía y la facilidad de movimiento. La meta es liberar el máximo potencial de placer matutino sin forzar el cuerpo ni romper el clima de cariño propio de las primeras horas del día. Además, algunas posturas elegidas ayudan a esquivar molestias comunes, como el mal aliento, y permiten experimentar sensaciones únicas.

Cucharita: comodidad y calidez en la intimidad

La cucharita es la reina indiscutible del sexo por la mañana. Despertar abrazados y pasar sin esfuerzo del sueño al placer es una ventaja poco común. Esta postura permite una penetración suave y profunda, sin la necesidad de cambiar drásticamente de posición. El calor corporal compartido, el roce del pecho y la libertad para explorar el cuerpo con las manos hacen que ambos sientan una ternura especial.

Además, al estar uno detrás del otro, los rostros se mantienen alejados, lo que reduce la importancia del aliento matutino. Esto elimina una preocupación frecuente y deja todo el protagonismo al placer y al despertar en compañía. La cucharita ofrece el espacio perfecto para susurrar gestos de cariño, besar la nuca o acurrucarse mientras el deseo sube de forma muy natural.

Foto Freepik

Loto: conexión profunda y contacto visual

Inspirada en el Kamasutra, la posición del loto se basa en la conexión frente a frente. La pareja se sienta en la cama, uno detrás del otro, de modo que siente a su amor sobre sus piernas, envueltos entre sí. Esta variante, parecida al clásico cruce de piernas, permite un contacto visual intenso y abrazos prolongados.

El loto reúne pasión y tranquilidad. Abrazarse, mirarse y sincronizar movimientos despierta un sentimiento de protección y seguridad. Además, la posición facilita caricias, besos y palabras suaves al oído, todo mientras los cuerpos mantienen un ritmo pausado pero firme. Es un modo delicado y efectivo de prolongar la sensación de unión durante todo el día que comienza.

Cara a cara: ternura y estimulación máxima

La posición cara a cara, con la pareja acostada de lado, crea uno de los momentos más íntimos posibles. Con los cuerpos alineados y los rostros cercanos, ambos pueden besarse, mirarse y sentir la respiración del otro. Permitir que una pierna abrace la cadera de la pareja, sumada al roce de piel con piel, multiplica la sensación de cercanía y deseo.

Esta postura fomenta la comunicación no verbal: miradas, caricias y gestos que hablan más que las palabras. Ofrece la oportunidad de empezar el día con un abrazo prolongado, unos besos o incluso palabras motivadoras. Sin incorporar movimientos bruscos ni incomodidad, maximiza tanto el placer físico como la conexión emocional, haciendo que ambos se levanten de la cama con una sensación de plenitud.

Seleccionar posiciones adecuadas para el sexo matutino transforma el inicio del día. Elegir la cucharita, el loto o el cara a cara no solo ayuda a vencer incomodidades como el mal aliento, sino que fortalece la complicidad y la satisfacción. El sexo a primera hora puede convertirse en ese ritual discreto y especial que suma bienestar y mantiene viva la chispa de la relación, aportando beneficios físicos y psicológicos que perduran mucho después de salir de la cama.

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