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Estas son las señales que afirman que has tenido un orgasmo

No se producen en todos los casos, por lo que continuación, te contaremos algunos indicios de que has tenido el máximo placer con tu pareja.

De acuerdo con el Journal of sex & marital therapy, el 81,6% de las mujeres no alcanza el clímax por tener relaciones sexuales sin ninguna estimulación adicional. En cambio, tan solo el 18,4% han afirmado que la penetración por sí sola no es suficiente para alcanzar el orgasmo.

De hecho, el 59% de las mujeres ha simulado un orgasmo al menos una vez en su vida. Además, según el Archives of sexual, «las chicas tardan aproximadamente, 14 minutos durante el sexo en pareja en alcanzar el clímax, aunque el tiempo disminuye durante la masturbación: solamente 8 minutos».

Sin embargo, lo que sí es completamente cierto es que todas llegan a experimentar sensaciones completamente diferentes. Muchas afirman sentir una liberación parecida a la de un estornudo, para otras es una poderosa ola que sube y sube, desde la punta de los dedos de los pies hasta el cerebro, aunque algunas expresan tener un espasmo incontrolable, al que sigue un estado de dicha y una líbido aún más impulsada.

Cada orgasmo es diferente porque todas las personas que lo experimentan son distintas: los sexólogos afirman que una mujer puede llegar a tener hasta 14 orgasmos. Sin embargo, lo que sí es seguro es que existen señales que, si están presentes, pueden hacer que una chica afirme: «He llegado al clímax». Esto no quiere decir que se deban presentar todas a la vez, ya que el placer es precisamente una experiencia subjetiva. Entre ellas encontramos:

Sientes tensión y luego una liberación

Muchas mujeres han comparado un orgasmo con la sensación de estornudar, esto se debe a que ambas experiencias comienzan con una acumulación de tensión, seguida de una liberación repentina. Ambas son reflejos de una reacción violenta del estado psicofísico: inmediatamente después te sientes mejor, relajado, liberando una carga de tensión.

Te sientes feliz y relajado

Al llegar al clímax, nuestro organismo comienza a producir grandes cantidades de las hormonas del bienestar: la oxitocina y la dopamina, las cuales proporcionan una grata sensación de satisfacción. Es decir, cuando sucede esto, el cerebro se ve bombardeado de estas sustancias, que juntas pueden fomentar sentimientos de euforia, vinculación, empatía y cercanía.

Tienes sueño

Por lo general, la mayoría de las personas tienen una sensación de somnolencia después de un orgasmo. De hecho, un estudio que se llevó a cabo en 2017 descubrió que aquellos que tenían un orgasmo antes de irse a la cama, contaban con una probabilidad más alta de tener un descanso pleno por la noche. A pesar de que se necesitan más investigaciones para confirmar la relación que los científicos han expresado, los expertos de este estudio le ameritan todo el crédito de este mejor descanso a la producción de oxitocina.

Tus músculos se contraen

Por otro lado, hay quienes afirman experimentar una especie de contracción involuntaria del sistema muscular, como un espasmo, durante o inmediatamente después de alcanzar el clímax. Aunque, hay quienes refieren una sensación de escalofríos. Estas contracciones musculares pueden producirse en las paredes vaginales, las nalgas, las piernas y los abdominales.

La respiración y el ritmo cardíaco cambian

Durante el orgasmo o inmediatamente después, la respiración se vuelve más profunda y el ritmo cardíaco más lento. Un estudio de 2008 reveló que, por término medio, la frecuencia cardíaca aumenta al principio de un orgasmo y vuelve a su ritmo básico entre diez y veinte minutos después.

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