Depresión post parto: la importancia de tratarla a tiempo

El nacimiento de un hijo puede producir un cruce de emociones como la alegría, el miedo, el entusiasmo o la ansiedad, ocasionando un terrible problema como la depresión.
Independientemente de que sea el primer o tercer hijo, los estudios indican que el 80% de las mujeres dicen que experimentan una leve depresión (baby blues) después del parto, es decir, tienen sentimientos de tristeza, preocupación y cansancio de forma leve, y que les duran poco tiempo. Por otro lado, el 20% de las puérperas experimentan el cuadro depresivo postparto, que es un trastorno del estado de ánimo después de ser madres.
¿Cómo se manifiesta este trastorno?
La llamada depresión posparto (DPP) o también depresión puerperal, es un delicado trastorno con distintos grados de gravedad, que se manifiesta con una profunda tristeza, irritabilidad, ansiedad, cambios de humor, sentimientos de inutilidad, culpa, cambios en el apetito, problemas para dormir, y se presenta de 3 a 4 días después del parto.
Durante lo primera semana o 12 días después del parto estos síntomas se consideran normales y suele llamarse “Maternity Blues”. Con el apoyo de la familia y amigos suele resolverse. Sin embargo, si se mantienen durante más tiempo o son muy intensos es recomendable acudir a un profesional que pueda valorar la situación particular de cada madre. Aunque se habla de “postparto” en realidad estos síntomas pueden aparecen a partir del segundo mes y durante el primer año.
¿Por qué se presenta este tipo de depresión posparto?
La aparición de este problema se debe ante todo al drástico cambio hormonal en los instantes posteriores al parto, presentándose un colapso de estrógenos y progesterona, además de un gran cansancio físico y mental debido a todo el trabajo de parto. Esto se puede dar en más del 70% de las madres.
Se desconoce sobre las causas de la DPP, ya que pueden haber causas biológicas por los cambios en la regulación de neurotransmisores, como la noradrenalina y la serotonina; causas genéticas, debido a que existen familiares cercanos que han padecido este mismo problema y causas externas, como las situaciones de estrés.
¿Cómo se puede aliviar este problema?
Obtener el descanso, la nutrición y el apoyo adecuados es bastante importante, ya que estar exhausta, privarse del sueño o sentirse estresada pueden reforzar y alimentar los sentimientos de tristeza y depresión.
La depresión posparto tiene un tratamiento parecido a cualquier otra depresión. La terapia psicológica es lo más indicado, sobre todo, cuando la madre está dando el pecho a su bebé. No obstante, en algunos casos, es necesario combinarla con medicamentos.