¿Necesitas contactar al equipo editorial? Envía tus correos electrónicos a [email protected] o ve a nuestro formulario.
Salud

Sífilis: ¿Conoces los síntomas de esta ITS que está de regreso?

¿Sabías que la sífilis está de regreso y afecta a más personas de lo que imaginas? Esta ITS, que alguna vez se pensó casi erradicada, ha resurgido con fuerza en muchos países, convirtiéndose nuevamente en una preocupación de salud pública. Los síntomas de la sífilis pueden ser variados y, a veces, confundir a quienes la padecen, lo que hace aún más importante estar bien informado. Conocer los signos tempranos de esta infección puede marcar la diferencia en recibir un tratamiento oportuno y evitar complicaciones graves.

¿Qué es la sífilis?

La sífilis es una infección de transmisión sexual (ITS) provocada por la bacteria Treponema pallidum. Aunque alguna vez se pensó casi erradicada, esta enfermedad ha resurgido y se ha convertido en un problema de salud pública en muchos países. La sífilis se transmite principalmente a través del contacto directo con una llaga que aparece durante las etapas primaria, secundaria e incluso en la etapa latente. Comprender las diferentes etapas y los síntomas de la sífilis es crucial para recibir tratamiento temprano y evitar complicaciones graves.

Síntomas tempranos de la sífilis

La sífilis progresa en varias etapas, cada una con sus propios síntomas característicos:

Etapa primaria:
En esta etapa, puede aparecer una llaga (chancro) en el área donde la bacteria ingresó al cuerpo, como los genitales, el ano o la boca. Esta llaga generalmente no causa dolor, lo que puede llevar a que pase desapercibida. La llaga desaparece por sí sola después de algunas semanas, pero la infección sigue presente.

Etapa secundaria:
Si no se trata, la infección progresa a la etapa secundaria. Los síntomas pueden incluir:

    • Un sarpullido en la piel que a menudo no pica y puede aparecer en cualquier parte del cuerpo, especialmente en las palmas de las manos y las plantas de los pies.
    • Fiebre.
    • Inflamación de los ganglios linfáticos.
    • Dolor de garganta.
    • Dolores musculares y fatiga general.

Estos síntomas pueden ser confundidos con otras enfermedades y, similar a la llaga en la etapa primaria, pueden desaparecer por sí solos sin tratamiento. Sin embargo, la bacteria sigue en el cuerpo y continúa provocando daño.

Sífilis latente

La sífilis latente es una etapa en la que los síntomas visibles han desaparecido, pero la infección sigue presente en el cuerpo. Se divide en dos subfases:

Sífilis latente temprana: durante esta subfase, la persona infectada no presenta síntomas visibles, pero la bacteria todavía está activa en su cuerpo. Puede durar meses o incluso años. Aunque no se presentan síntomas, la persona sigue teniendo la capacidad de transmitir la infección.

Sífilis latente tardía: en esta etapa, la bacteria puede estar inactiva durante varios años antes de causar síntomas graves. La sífilis latente tardía puede provocar problemas graves como daños al corazón, cerebro y otros órganos vitales, lo que puede ser potencialmente mortal si no se trata a tiempo.

Diagnóstico y tratamiento

La sífilis es una enfermedad que, si no se detecta a tiempo, puede tener consecuencias graves para la salud. Por esta razón, es esencial comprender cómo se diagnostica y se trata esta infección de transmisión sexual.

Pruebas de detección

Las pruebas comunes utilizadas para diagnosticar la sífilis incluyen:

Prueba de VDRL (Venereal Disease Research Laboratory): esta prueba busca anticuerpos que el cuerpo produce en respuesta a la infección por sífilis. Es simple y económica, pero puede presentar falsos positivos en algunas ocasiones.

Prueba de RPR (Rapid Plasma Reagin): similar a la VDRL, la prueba de RPR detecta anticuerpos contra la bacteria que causa la sífilis. Es útil para el diagnóstico inicial, pero se deben realizar pruebas adicionales para confirmar los resultados.

Prueba de TPHA (Treponema Pallidum Hemagglutination Assay): una prueba confirmatoria que detecta la presencia de anticuerpos específicos para la sífilis. Se utiliza para confirmar un resultado positivo en pruebas anteriores.

Es importante destacar que la detección temprana de la sífilis es fundamental para evitar complicaciones posteriores y detener la propagación de la infección.

Tratamiento de la sífilis

El tratamiento de la sífilis generalmente implica el uso de antibióticos, que pueden variar en función de la etapa de la infección:

Etapa primaria y secundaria: en estas etapas iniciales, la penicilina es el tratamiento preferido y más efectivo. En casos de alergia a la penicilina, se pueden utilizar otros antibióticos como doxiciclina o ceftriaxona.

Sífilis latente: el tratamiento en esta etapa también consiste en antibióticos, generalmente penicilina, para eliminar la bacteria y prevenir la progresión de la infección.

Es fundamental seguir el tratamiento prescrito por un profesional de la salud y completar el curso completo de antibióticos para asegurar la eliminación de la bacteria y reducir el riesgo de complicaciones a largo plazo.

Foto Freepik

Prevención y consejos

La prevención de la sífilis es fundamental para proteger la salud sexual y prevenir la transmisión de esta infección de transmisión sexual. A continuación, se presentan consejos prácticos que pueden ayudar a reducir el riesgo de contraer sífilis:

Educación y concientización

La educación sexual desempeña un papel crucial en la prevención de las infecciones de transmisión sexual, incluida la sífilis. Es esencial que las personas estén bien informadas sobre cómo se transmite la sífilis, los síntomas asociados y la importancia de buscar ayuda médica si se sospecha una infección. La concientización sobre la necesidad de usar medidas de protección, como el condón, en las relaciones sexuales también es fundamental para evitar la propagación de la enfermedad.

Para ello, se recomienda:

Charlas educativas: asistir a charlas y talleres sobre educación sexual puede mejorar el conocimiento sobre las its.

Material informativo: leer folletos y artículos sobre enfermedades de transmisión sexual para estar mejor informado.

Hablar abiertamente: mantener conversaciones honestas sobre salud sexual con la pareja y con profesionales de la salud.

Atención médica regular

Mantener revisiones médicas periódicas es clave para detectar cualquier enfermedad de transmisión sexual, incluida la sífilis, en sus etapas tempranas. La detección precoz aumenta las posibilidades de un tratamiento efectivo y reduce el riesgo de complicaciones a largo plazo.

Consejos para mantener una atención médica regular:

Pruebas de detección rutinaria: las personas sexualmente activas deben someterse a pruebas de ITS regularmente, incluso si no presentan síntomas. Esto es esencial para una salud sexual óptima.

Visitas médicas: programar visitas regulares con un médico especializado en salud sexual para asegurarse de que todo esté en orden.

Historial médico: mantener un registro detallado de cualquier síntoma o infección pasada y compartirlo con el profesional de la salud.

La prevención de la sífilis también involucra prácticas sexuales seguras y el uso consistente del condón en todas las relaciones sexuales, ya que el contacto directo con las lesiones de la sífilis aumenta el riesgo de transmisión. Además, mantener una comunicación abierta y honesta con la pareja sobre el historial sexual y la realización de pruebas juntos puede fortalecer la prevención y el manejo de las ITS.

¿Le resultó útil este artículo?
Lee también:
Dany Levito