Cómo aliviar la acidez estomacal durante el embarazo
La acidez estomacal es un síntoma común durante la gestación que puede resultar incómodo y molesto
Durante el embarazo, es posible experimentar acidez estomacal, una molestia que puede resultar incómoda e incluso dolorosa en algunos casos. Esta sensación de ardor en el estómago, también conocida como reflujo ácido o ERGE, suele manifestarse durante el segundo y tercer trimestre. Si deseas disfrutar plenamente de tu embarazo, es importante comprender qué causa esta acidez y cómo puedes tratarla de manera segura.
La acidez estomacal durante el embarazo es principalmente provocada por el reflujo ácido en el esófago. La hormona progesterona, que se encuentra en niveles elevados durante la gestación, relaja los músculos del tracto digestivo. Esto ralentiza el proceso digestivo y debilita la válvula que conecta el estómago y el esófago, permitiendo que los ácidos gástricos se escapen hacia arriba.
Irritación en la mucosa
Además, el crecimiento del útero ejerce presión sobre el estómago, lo que hace que los líquidos gástricos asciendan hacia el esófago, generando el reflujo. Estos ácidos irritan la mucosa y las cuerdas vocales, y se manifiestan con síntomas como ardor detrás del esternón, dolor de garganta, tos, ronquera, regurgitación ácida, sabor desagradable en la boca, dificultad para tragar o presión en la parte superior del abdomen.
Afortunadamente, existen soluciones eficaces para aliviar la acidez estomacal durante el embarazo sin necesidad de receta médica. Gavisconel, por ejemplo, es un medicamento que proporciona alivio y calma el reflujo ácido. Sin embargo, es importante consultar a tu médico antes de utilizar cualquier producto contra la acidez, incluyendo Gavisconel. Se recomienda tomarlo con al menos dos horas de diferencia de otros medicamentos y se espera que los síntomas desaparezcan en un plazo de siete días.
La alimentación es base de todo
Además del tratamiento farmacológico, puedes realizar cambios en tu estilo de vida para evitar este malestar y tener un embarazo tranquilo. La alimentación juega un papel fundamental, por lo que se recomienda evitar o limitar el consumo de alimentos picantes, grasos o fermentados que puedan desencadenar la acidez. Opta por alimentos espesos como plátanos y arroz integral. Si no padeces hipertensión, el regaliz puede tener un efecto protector y antiinflamatorio.
Es importante evitar platos con salsas, vinagre, col, bebidas gaseosas y queso fundido, ya que pueden agravar la situación. Combina el uso de productos para aliviar el ardor con un estilo de vida saludable que incluya una alimentación equilibrada y la práctica de ejercicio físico adecuado para cuidar tu salud durante el embarazo.
Recuerda que cada embarazo es único, por lo que es fundamental consultar a tu médico para obtener orientación personalizada sobre cómo manejar la acidez estomacal y garantizar tu bienestar y el de tu bebé. Al seguir estos consejos y tomar medidas apropiadas, podrás disfrutar de tu embarazo de manera más cómoda y tranquila.
Tips a tener en cuenta
Además de los cambios en la alimentación y el uso de medicamentos adecuados, hay otras medidas que puedes tomar para reducir la acidez estomacal durante el embarazo. Aquí tienes más información para ayudarte a lidiar con esta molestia:
- Mantén una postura adecuada: Evita encorvarte o recostarte inmediatamente después de comer. Mantén una postura erguida durante y después de las comidas para facilitar la digestión y evitar que los ácidos gástricos se desplacen hacia el esófago.
- Realiza comidas pequeñas y frecuentes: En lugar de tres comidas grandes al día, opta por comidas más pequeñas y repartidas. Esto ayudará a reducir la presión sobre el estómago y minimizará las posibilidades de reflujo ácido.
- Evita las comidas pesadas antes de acostarte: Intenta cenar al menos dos o tres horas antes de irte a dormir. Dar tiempo suficiente a tu cuerpo para digerir los alimentos antes de acostarte puede disminuir la probabilidad de que experimentes acidez estomacal durante la noche.
- Eleva la cabeza de la cama: Elevar la parte superior del cuerpo mientras duermes puede ayudar a prevenir el reflujo ácido. Utiliza almohadas extras o coloca bloques debajo de las patas de la cama para elevar la cabecera.
- Evita la ropa ajustada: Las prendas ajustadas alrededor del abdomen pueden ejercer presión adicional sobre el estómago, lo que aumenta las posibilidades de reflujo ácido.
- Controla el estrés: El estrés puede empeorar los síntomas de la acidez estomacal. Busca técnicas de relajación como la meditación, la respiración profunda o el yoga para reducir el estrés y mejorar tu bienestar general.
Recuerda que cada embarazo es diferente, por lo que es esencial escuchar a tu cuerpo y adaptar estas recomendaciones a tus necesidades individuales. Si los síntomas de la acidez estomacal persisten o empeoran a pesar de estos consejos, no dudes en consultar a tu médico para recibir un diagnóstico preciso y obtener un tratamiento adecuado.
