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Salud

¿Cuántos días puede pasar un humano sin defecar y que no sea peligroso?

El buen funcionamiento del sistema digestivo es crucial para que el cuerpo opere de la manera correcta

La frecuencia normal de defecación tiende a variar mucho de una persona sana a otra, ya que hay muchos factores que contribuyen con la regularidad con la que se genera la función intestinal, e influyen en el número de veces que se va al baño y la hora que se hace, desde la dieta hasta el estado general de salud.

Para que se considere fisiológica regular y sin problema, la actividad intestinal regular requiere ir al baño un mínimo de tres veces por semana y como máximo no más de tres veces al día. Dentro de este rango la función de eliminación de residuos fecales puede considerarse normal y no debe despertar nuestra preocupación.

¿Qué es el estreñimiento?

Conocido como constipación, se hace referencia a una dificultad que aparece al momento de defecar. En este sentido, una frecuencia de evacuación inferior a tres veces por semana no es suficiente para considerarse un caso de estreñimiento, sino que además de la frecuencia reducida de evacuación, deben presentarse otros síntomas adicionales:

  1. Sensación de vaciado intestinal.
  2. Heces demasiado duras.
  3. Dificultad y esfuerzo para defecar.
  4. Sensación de bloqueo u obstrucción en el ano.

¿Cuánto tiempo se puede pasar sin ir al baño?

Científicamente hablando no existe un periodo de tiempo totalmente definido, ya que cada persona es diferente, con diferentes hábitos alimentarios y distintos estados de salud en el sistema gastrointestinal; esto además de considerar la intervención de una serie de factores diferentes como el estilo de vida, la frecuencia de actividad física y el estrés.

En ocasiones puede haber una condición patológica subyacente, como una obstrucción intestinal, las cuales no permiten que las heces pasen con normalidad. Esto requiere de una atención médica antes de que se convierta en una emergencia difícil de tratar.

Además, hay algunas personas que retienen las heces o se niegan físicamente a defecar debido a la ansiedad que les produce acudir al baño. En este caso, se le conoce como encopresis psicógena.

El consejo es que, en lugar de centrarse en un número concreto de días, se tenga en cuenta los síntomas derivados de no defecar. Estos suelen ser:

  1. Hinchazón y dolor abdominal.
  2. Necesidad de evacuar, pero sin poder conseguirlo.
  3. Náuseas y vómitos.

Si no consigues defecar durante una semana o más y tienes presencia de estos síntomas, es mejor acudir con un médico para evitar complicaciones graves.

¿Qué puede pasar cuando no defecamos?

La falta de excreción, además de afectar al funcionamiento del sistema digestivo, genera efectos secundarios de manera general en nuestro cuerpo. Algunas de las posibles complicaciones son:

  • Coprostasis: esta complicación aparece como consecuencia del estancamiento y el endurecimiento de las heces en los últimos tramos del intestino. La masa fecal sólida impide el paso de la materia fecal, al punto de causar obstrucción. Los síntomas son los típicos de la obstrucción intestinal: dolor en la región abdominal, calambres, contracciones espasmódicas del esfínter anal, náuseas y ataques repetidos de vómitos.
  • Perforación intestinal: Cuando se acumula un exceso de heces en el intestino, estas pueden ejercer demasiada presión al punto de perforar o causar un desgarro, conectando el interior del lumen con la cavidad peritoneal u otros órganos que estén cerca. La perforación intestinal es grave y requiere de atención medica rápida, puede manifestarse con dolor abdominal intenso seguido de signos de shock.

En estos casos, y en aras de encontrar un escape, las heces pueden filtrarse en la cavidad abdominal y provocar complicaciones graves y potencialmente mortales, tanto como una peritonitis o una mediastinitis.

Remedios y consejos útiles

Cambia la forma en la que te alimentas y aumenta el consumo de frutas y alimentos naturales que puedan favorecer el tránsito intestinal. Algunos ejemplos son:

  1. Cereales integrales (pan y pasta integrales).
  2. Judías.
  3. Garbanzos.
  4. Bayas.
  5. Manzanas.
  6. Naranjas.
  7. Brócoli.
  8. Guisantes verdes.
  9. Frutos como almendras, cacahuetes y nueces.

Además, se deben evitar los alimentos que puedan potenciar el estreñimiento, algunos ejemplos son las patatas fritas, la comida basura, la carne en exceso y los alimentos precocinados o embutidos.

 

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Dany Levito